Stelea pide el embargo de la plaza del Salamanca en Segunda División

La Voz

DEPORTES

15 feb 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

El Salamanca atraviesa uno de los momentos más delicados de su historia. Con escasas posibilidades de ascender a Primera y una deuda que ronda los 27 millones de euros, al conjunto castellano se le puede incluso cerrar una de las salidas que contemplaba, la de la venta, ya que su ex jugador Bogdan Stelea, al que adeuda 1,2 millones de euros, ha solicitado el embargo de la plaza del equipo en Segunda División.

La petición del embargo de la plaza, que a efectos económicos está tasada entre 2 y 3 millones de euros, ha sido el último recurso de Stelea, que llegó al Salamanca en la temporada 97-98, para asegurarse el cobro de los aproximadamente 200 millones de pesetas. De esta forma, si los dirigentes salmantinos deciden vender la plaza, el portero rumano cobraría de forma inmediata.

Venta de la plaza

Para frenar esta crítica situación, el presidente, Juan José Pascual, pidió también el embargo de la plaza en nombre de una de sus empresas, pero varios días después de que lo hiciera Stelea.

La situación de la histórica entidad, que ha militado 12 temporadas en la máxima categoría del fútbol español, está marcada por una deuda que ronda los 27 millones de euros, en su mayoría está contraída con Hacienda y que está supeditada a una serie de embargos patrimoniales que impiden conseguir ingresos sin tener que pagar de forma inmediata. El club contaba con permutar el estadio Helmántico, de su propiedad, con el Ayuntamiento de Salamanca a cambio de suelo público mediante el que la entidad obtendría los beneficios resultantes de la construcción de viviendas de promoción oficial, pero, al margen de los embargos que pesan sobre la sociedad, los terrenos están en un ayuntamiento limítrofe y no en la capital. El conjunto unionista tenía en marcha una serie de operaciones financieras que tampoco han llegado a buen puerto y que ahora le obligan a hacer frente a los avales. En los últimos días, una posible salida de la crisis pasaba por vender la plaza, algo que ahora se ha complicado con la petición de embargo por parte de Stelea; la otra posibilidad es la de acogerse a la Ley Concursal.

El último descenso

El descenso a Segunda División en la temporada 98-99, las fichas multimillonarias y la ruptura de los contratos con las televisiones fueron el origen de esta lacra. Para evitar la desaparición del club salmantino, que fue fundado en 1923, la directiva ha firmado varios convenios con empresas e instituciones y ha creado el carné de simpatizante y la plataforma Salvemos a la Unión, originada por un grupo de seguidores que pretende servir de nexo entre equipo, instituciones y afición. La junta directiva también estudia la posibilidad de poner al estadio el nombre de una conocida marca comercial.