Los accionistas impugnan la junta al considerar que el consejo incumplió la ley

La Voz

DEPORTES

Unos treinta socios abandonaron el Santa María del Mar indignados por unas cuentas que no han sido entregadas en fecha ni auditadas

30 dic 2007 . Actualizado a las 19:50 h.

La junta general de accionistas (ordinaria y extraordinaria) del Real Club Deportivo, celebrada anoche en el Colegio Santa María del Mar, fue impugnada por socios de la entidad centenaria que hicieron constar ante notario su desacuerdo con los datos económicos ofrecidos por Lendoiro y al no considerarlos las cuentas oficiales. Los socios discrepantes destacaron el retraso en la publicidad de esos datos, solo disponibles un día antes de la junta, y la inexistencia de una auditoría, que ha sido reemplazada por una revisión limitada.

La impugnación, que deberá ser presentada en un juzgado mercantil en un plazo máximo de 40 días, tiene por objeto la anulación de los acuerdos adoptados en la asamblea (incluye la aprobación de las cuentas y el presupuesto) y la celebración de una nueva junta si el juez considera que ha lugar. Los socios críticos abren así por vez primera un frente judicial contra Lendoiro.

El primer accionista que anunció su intención de impugnar fue Luis García Rodríguez. «La Ley dice que tenemos derecho a la información, a que nos den las cuentas, pero ni ayer -por el viernes- me las enseñaron cuando las fui a pedir. Además, no hay auditoría, así que impugno esta asamblea», proclamó en medio de sonoros aplausos.

El segundo en impugnar los acuerdos de la junta fue Manuel Pardo: «No se ha cumplido con el artículo 212 de la Ley de Sociedades Anónimas sobre el derecho de los socios a obtener las cuentas con antelación suficiente. Y, además, no existe informe de auditoría, lo que incumple también la ley. Por todo esto, creo que la junta es inválida, la abandono voluntariamente y hago entrega de mis derechos de voto para que no computen en las votaciones», explicó.

Unos treinta accionistas del Deportivo siguieron el ejemplo de Pardo, entregaron sus derechos y abandonaron el recinto, dejando en manos de la ley la resolución de lo que consideran una asamblea no válida.

Esta medida llevó al notario a recontar el número de acciones y accionistas para reajustar los datos ofrecidos al comienzo. Según estos, había 214 socios, con 4.837 acciones. Además, estaban representados otros 1.473, con 26.238 títulos. El total de accionistas era, por tanto, de 1.687, y el de acciones, de 31.075. El capital ascendía a 1.867.607,5 euros. Es decir, el 24,1%.

Pardo apoyó su decisión en la interpelación realizada previamente por el socio Alberto Artaza, que preguntó a Lendoiro desde cuándo estaban los datos a disposición del accionista en la sede del club y si están auditadas las cuentas. Lendoiro no respondió al segundo punto, pero admitió que las cuentas llegaron «ayer por la tarde».

El consejo sacó adelante el orden del día, amparado en la mayoría que le otorgaban los votos representados. Aprobó las cuentas, un presupuesto de 65 millones y la contratación de Olszewski Auditores S.L. por tres años. Dicha firma no ha hecho una auditoría, sino una revisión limitada y crítica de las cuentas en la que pone en duda un beneficio extraordinario de 69 millones.