La propuesta arquitectónica formula el «máximo respeto» al monumento megalítico, y propone intervenciones que ayuden «a sostener y conservar el mismo, aplicando criterios de integración de paisaje y territorio».
24 abr 2008 . Actualizado a las 15:39 h.El proyecto definitivo para la recuperación del dolmen de Dombate, que redactará el arquitecto coruñés Francisco Vidal Pérez, respetará «al máximo» el monumento megalítico.
La junta de gobierno de la Diputación coruñesa acordó hoy adjudicar a Vidal Pérez la ejecución del proyecto, tras ratificar el acuerdo adoptado por unanimidad por la comisión técnica que estudió las tres propuestas presentadas al concurso de ideas que debían concretar la actuación en el monumento, ubicado en el municipio de Cabana de Bergantiños.
Según fuentes del ente provincial coruñés, la comisión ha seleccionado por unanimidad la propuesta presentada por Vidal Pérez al destacar «su originalidad», en cuanto a la solución constructiva, «pureza de diseño, reversibilidad, minimización volumétrica respecto a su entorno y máximo respeto al conjunto».
La propuesta arquitectónica formula el «máximo respeto» al monumento megalítico, y propone intervenciones que ayuden «a sostener y conservar el mismo, aplicando criterios de integración de paisaje y territorio».
Francisco Vidal Pérez dispone ahora de dos meses para la redacción definitiva del proyecto de recuperación del dolmen de Dombate, uno de los monumentos megalíticos más representativos y mejor conservados de Galicia.
El proyecto plantea la construcción de dos edificaciones independientes, una para el dolmen y otra para el centro de recepción e interpretación.
En cuanto a la protección del túmulo, propone que uno de los factores determinantes para su protección será aquel que contribuya a que las condiciones climáticas del interior sean las idóneas, de forma que se rebaje la humedad existente en el interior de la cámara, por ser este el agente más importante de deterioro.
Así, el criterio del arquitecto Vidal Pérez en materia de control climático es intentar mantener un microclima en el interior del recinto de la forma más natural posible.
La Diputación de A Coruña ha instalado ya una carpa de protección para preservar el túmulo, como paso previo a la intervención proyectada para los próximos meses.