El feliz regreso de Helia González

Iván antelo A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA

30 nov 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

El trabajo más ingrato para un deportista. Un año de esfuerzo y sacrificio en la penumbra. Eso es lo que ha tenido que pelear Helia González (A Coruña, 1985) para volver a enfundarse las rodilleras y la camiseta del Menorca, después de aquella grave lesión de rodilla que estremeció al voleibol nacional.

Pero la tenaz deportista coruñesa está de vuelta. Ya ha jugado sus dos primeros partidos y lo ha hecho a un gran nivel. Defendiendo los colores del actual campeón de la Superliga y uno de los favoritos a revalidar triunfo. «Volver a competir con el equipo era algo que veía muy lejano hace muy poco. Por fin pudo ser posible», muestra con ilusión la joven jugadora de la parroquia culleredense de O Burgo.

«En general me vi muy bien. Hay movimientos y determinados balones que me cuestan más e iré mejorando con el tiempo. Pero en general ha sido mucho mejor de lo que se esperaba», destaca con cautela.

Su impactante lesión se produjo el 8 de diciembre del 2010 en el transcurso de un partido de competición europea. Su espectacular caída cuando se dirigía a hacer un remate en la red y sus gritos de dolor conmocionaron a los 1.500 aficionados que abarrotaban la cancha. Por eso, en su regreso, el primer punto se celebró de forma especial. «El publico lo aplaudió mucho y sobre todo mi preparador físico, al que podía escuchar en la grada. El hecho de que el medico que me operó hubiera querido estar sentado en el banquillo también fue especial», resalta.

«Una recuperación así es imposible llevarla a cabo sola. Así que el doctor Massanet, la fisioterapeuta Sofia junto a las demás fisios y el preparador físico Joan Leon han sido piezas fundamentales. A nivel personal también hay compañeras de equipo a las que estaré eternamente agradecida», apunta conteniendo la emoción.

Para llegar este momento, Helia tuvo que realizar muchos sacrificios, como privarse de unas vacaciones en familia y con sus amigas de siempre. «La recuperación siempre es complicada. En mi caso muy dura por la gravedad. No salí de Menorca en todo el verano. Lo hice para volver a jugar de nuevo a lo que más me gusta. Nunca perdí la ilusión», añade. Su equipo, el Menorca, marcha segundo en la Superliga, con dos victorias en sus dos enfrentamientos. «En mente tenemos jugar para ganar todo lo que tengamos delante. Trabajamos por y para el día a día y si todo sale bien no tengo duda que el equipo estará ahí arriba», destaca ambiciosa.