Marcos Meléndrez (A Coruña, 1962) forma junto al argentino Gastón Rodríguez el dúo Tango Bar, que esta noche y el próximo día 12 de julio actuarán en el pub Garufa, en la Ciudad Vieja.
-Durante muchos años fueron una de las bandas residentes del Garufa. ¿Cómo ven este fenómeno en la ciudad?
-Las hay que aguantan y las hay que no. Pero tampoco hay mucho. Si tienes la suerte de tocar todas las semanas, pues te sirve de ensayo y para desarrollar un poco el grupo.
-Un clásico de la música en directo como usted, ¿cómo ve el futuro de los grupos nuevos que están empezando en esto?
-Ganar dinero no se gana, pero luego tienes trabajos con los que si tienes suerte vas tirando. Nosotros venimos de Alemania, tuvimos tres conciertos allí, y bastante bien. Por lo menos te mueves y abres campo.
-¿Sigue entusiasmando a la gente joven?
-Mayoritariamente es un público más adulto porque le recuerda a su juventud, pero también tenemos público joven.
-¿Qué tiene el tango que le hace especial?
-Principalmente letra, porque cuenta historias universales. A mí me pone contento, y eso que a veces es muy triste. Tiene teatro, interpretación, texto, poesía, música y baile.
-Durante más de una década formó parte de Los Doré. ¿Qué importancia tuvieron en la música coruñesa?
-Fuimos un grupo de referencia durante mucho años. Aparecíamos en todos los programas de la televisión gallega y portuguesa. Fueron doce años muy intensos, que marcaron una época. Hay gente que quiere que vuelvan, pero no puede ser.
Marcos Meléndrez Músico