Los okupas de la casa de las Atochas niegan que su manifestación fuese violenta
A CORUÑA CIUDAD
Diversas páginas de Internet publicaron ayer un comunicado elaborado por la asamblea del colectivo okupa de la casa de las Atochas. Uno de los principales objetivos del texto pasa por defenderse de las acusaciones de violencia que recibió la concentración por parte de partidos políticos y asociaciones de vecinos y comerciantes. Organizado en forma de pregunta-respuesta, el comunicado recoge la frase interrogativa de «¿fue una manifestación violenta?», a la que se responde «rotundamente no». «En ningún momento se molestó ni se faltó al respeto a persona alguna. Tampoco permitimos que nadie aproveche la situación para no comportarse como es debido. Desde la asamblea estamos abiertos a todo el mundo y a las críticas constructivas que se nos quieran hacer para mejorar nuestras acciones, pero por desgracia gran parte de las críticas que estamos recibiendo son demagógicas, falsas e injustas, por lo que el debate de ideas se hace del todo imposible».
Otra de las preguntas que también se realiza el comunicado fue una de las razones que la delegación del Gobierno señaló para justificar que la policía no hubiese intervenido a la hora de detener a los autores de destrozos y pintadas: «¿Por qué no legalizamos las manifestaciones?», se preguntan. «Como ya dijimos en la manifestación, somos anticapitalistas; no creemos en el dinero ni en la propiedad privada; sí creemos en la justicia social, la igualdad, la solidaridad, el apoyo mutuo, y no sabemos expresar nuestro malestar y rechazo cantando villancicos». También señala el colectivo que «muchos de nosotros preferimos que nos echen del trabajo (que a fin de cuentas no nos agrada y solo sirve para llenar la cazuela de garbanzos) a que nos echen de un espacio donde desenvolvemos nuestro potencial».
Mensaje de la Policía Local
La asociación profesional de la Policía Local de A Coruña emitió también un comunicado en relación a la manifestación. Precisa que «a la Policía Local le fue encomendado el control de esta manifestación ilegal. Su presencia, muy reducida, se limitaba a colaborar con el Cuerpo Nacional de Policía». «Se supone que las autoridades estaban informadas, y que la Unidad de Intervención del CNP estaba para controlar la situación. Los policías locales, ante el cariz que tomaban los hechos, hicieron todo lo que estuvo en su mano para evitar mayores daños, tratando de anticiparse a los manifestantes, pudiendo aun así avisar con muy escaso margen a muchos vecinos y comerciantes. No es lógico que ahora se insinúe inactividad de esos policías», añade.