La familia del niño ahogado en la piscina del Liceo cree que la instrucción ya está hecha y que existen pruebas suficientes para imputar a los directores del centro
30 mar 2010 . Actualizado a las 02:00 h.Hoy, hace exactamente un año, la ciudad se estremeció con la muerte de un niño de 4 años cuando recibía clases de natación en la piscina del Colegio Liceo La Paz. Su fallecimiento motivó un proceso judicial que todavía busca descifrar las incógnitas que rodearon el ahogamiento de este pequeño. Poco se avanzó desde entonces. La titular del Juzgado de Instrucción número 3 estudia las declaraciones y todos los informes que hasta ahora llegaron a su mesa para poder decidir si hay responsables o no; y, en caso de que los hubiera, quiénes son. La magistrada aún no ha decidido si sobresee la causa, la tipifica como falta o estima que existió delito. Si es así, los que resulten condenados podrían responder con cárcel.
Para que la jueza tome una decisión deberá averiguar antes lo que ocurrió entre las 10.26 y las 10.38 horas del 30 de marzo del año pasado en la piscina. Deberá conocer al detalle si el niño salió del agua, si regresó, si cayó, si había monitores en ese momento...
Importantes para el esclarecimiento de esta tragedia fueron los testimonios de las personas que estaban en las instalaciones del colegio aquel día y la del médico que atendió a Diego, que declaró en su día que «con un niño en parada cardiorrespiratoria, por la coloración que presentaba, por el estado de su piel y por las mucosas» se desprende que «no había estado ni un minuto ni dos bajo el agua, sino mucho más tiempo».
De todo eso se extrapola, según el letrado y portavoz de la familia, José Luis Gutiérrez Aranguren, que hay pruebas más que suficientes para imputar a los directores del centro. Los hechos, según los padres del menor, sucedieron así: Una de las profesoras, que hacía labores de apoyo para vestir a los pequeños, se cruzó con el niño en los vestuarios a las 10.26 horas. Iba descalzo y, al parecer, sin la burbuja-flotador porque se dirigía al baño. En ese momento finalizó el curso en la piscina, que quedó aparentemente vacía, y a las 10.38 Diego Novo Anido fue hallado muerto en el agua. Se desconoce si regresó a por las chanclas y, hasta el momento, nadie ha podido confirmar haberlo visto ni aclarar en qué ?circunstancias se produjo su muerte en el agua. La misma docente indicó que fue otra profesora, ya en los vestuarios y con los niños duchados, la que se dio cuenta de que el pequeño no estaba al ver su ropa y no a él. Entonces, según el letrado, fue cuando descubrieron el cuerpo de Diego en el fondo de la piscina.