La SGAE quiere cobrar por la representación de «Bodas de Sangre» a los alumnos de un instituto coruñés

Redacción digital A CORUÑA

A CORUÑA

Desde el centro escolar muestran su indignación al tratarse de una actividad de teatro escolar.

03 feb 2010 . Actualizado a las 21:38 h.

La polémica por los cobros de la Sgae continúa. Si la semana pasada un festival benéfico en Cambre era el protagonista, estos días, lo son los alumnos de ESO y bachillerato del instituto de Zalaeta, en A Coruña.

Los estudiantes llevan desde septiembre trabajando en la representación de la obra de Federico García Lorca Bodas de Sangre, «empregando o seu tempo libre como as fins de semana e días non lectivos», tal y como apunta Alicia Veres, vicedirectora del centro.

La Sgae pretende cobrarles un mínimo de 95 euros por llevar a escena este clásico lorquiano, sobre el que tiene los derechos el Centro Dramático Nacional, que sí les ha permitido representar la obra, pero no que se pueda cobrar la entrada, como estaba previsto. Los alumnos de Zalaeta iban a representarla en el Forum Metropolitano el próximo día 19 de febrero vendiendo los billetes a 2 euros.

En cualquier caso, la vicedirectora afirma que se intentará reunir el dinero y pide a las autoridades pongan una norma que diferencie entre el teatro profesional y el escolar.

La SGAE ha emitido un comunicado de prensa en el que puntaliza que la sociedad general de autores «se limita a la gestión y reparto de los ingresos resultantes, pero no establece las tarifas sino que actúa por mandato expreso del autor». En este caso los herederos de la obra conceden a una compañía de teatro , (el Centro Dramático Nacional, en el caso de Bodas de Sangre) la representación de la obra y fijan el precio de sus derechos.

Desde la SGAE informan de que hasta el pasado día 29 de enero la compañía de teatro escolar no solicitó la autorización para la representación de la obra, momento en el que se les explicó la excusividad del CDN «entidad que tiene la capacidad para permitir la representación de la obra y que puso como condición que no se cobrase entrada».

También se refiere a la compañía como de teatro aficionado y no escolar, porque argumenta que «no se realiza en el ámbito escolar sino en un recinto público y habitual en el circuito de teatro profesional y aficionado gallego e incluso estatal».