Proponen «permutas» con los adjudicatarios de Eirís y Mesoiro para evitar «guetos verticales»
A CORUÑA
El conflicto reabierto por la ocupación y el retraso en la entrega de las viviendas de promoción pública en Eirís y Novo Mesoiro fue también abordado ayer por el portavoz de la oposición, quien hizo un llamamiento al gobierno local para tratar de buscar una solución consensuada para la reubicación de 22 familias chabolistas que concurrieron a la adjudicación y lograron un piso.
Negreira aludió a fórmulas aplicadas en ciudades como Lugo, y abogó por «operar alguna permuta para seguir los consejos de la propia mesa de integración y evitar guetos verticales». En su opinión, de mantenerse las condiciones actuales en el sorteo de pisos, se correría el riesgo de que se produjesen «concentraciones que, según los vecinos, pueden crear problemas de integración», indicó.
Por su parte, la concejala de Servicios Sociales, Silvia Longueira pidió al PP que no confunda a los vecinos y aclaró que nada tiene que ver el plan municipal para realojar a los chabolistas con la adjudicación de los pisos de protección. Sobre el retraso en el proceso de realojo, dijo que se alargará «menos de un año». El concejal de Rehabilitación Urbana e Vivenda, Mario López Rico, criticó las «técnicas de propaganda nazi» que realiza el PP en relación a este tema.
El delegado de la Xunta, Diego Calvo, indicó que el proceso administrativo de las viviendas de Eirís «está cerrado» y aclaró en relación a las de Novo Mesoiro que tras rematar las obras se procederá al sorteo y a la adjudicación. «Si podemos dar información y atender las demandas, lo vamos a hacer». La asociación de vecinos de Novo Mesoiro solicitará otra reunión con Calvo.