La ciudad tiene razones más que suficientes para poder contar con una facultad de Medicina propia, sin tener que depender para nada de la Universidade de Santiago. El principal motivo es el gran número de infraestructuras sanitarias que están ubicadas en los apenas 42 kilómetros cuadrados de extensión de A Coruña, y algunas de las cuales se han situado en el ránking de los mejores hospitales del país, e incluso de Europa, por la atención y los servicios que ofrecen a los pacientes.
Se calcula que más de 10.000 personas trabajan a diario en alguna institución -pública o privada- vinculada con la salud, y que tienen un radio de actuación que supera los 515.000 habitantes, puesto que en la urbe coruñesa se encuentran los centros de referencia de toda la comarca, e incluso la provincia y la comunidad en algunas áreas específicas. Solo en el Complexo Hospitalario Universitario A Coruña (Chuac) trabajan cerca de 4.900 personas, ya que de él dependen los hospitales A Coruña, el Teresa Herrera, el de Oza, el Abente y Lago, los centros de especialidades del Ventorrillo y del Abente y Lago, el Hotel de Pacientes y el Centro de Orientación Familiar (COF).
Algunos de los aspectos en los que destaca el Chuac es que es un centro de referencia estatal para el trasplante de pulmón, corazón y páncreas, como fue calificado en su día por el Ministerio de Sanidad. Este nombramiento le fue concedido después de que, en la última década, se colocase entre los cinco o seis hospitales españoles que mayor número de intervenciones de este tipo realizan, empleando las técnicas más novedosas y alcanzando un alto nivel de éxito. En los últimos ejercicios, ha ido incorporando nuevos programas, e impulsado especialmente los trasplantes de riñón con donantes vivos.
Otros servicios con los que sobresale en el conjunto de España son el de Atención Temprana o Rehabilitación Infantil, que incluso recibió el premio Reina Sofía. Fue pionero también en cirugía fetal o intrauterina, y son muy apreciadas áreas como Neonatología, Dermatología, Cirugía Torácica, Nefrología o Vascular, por citar algunas, así como, los departamentos de Cardiología y Cirugía Cardíaca, incluida la infantil, que han sido distinguidos con múltiples reconocimientos y están en los primeros puestos del ránking. Entre lo más destacado de esta área, que dirige el doctor Alfonso Castro Beiras, están sus tres salas de Hemodinámica, una unidad que funciona las 24 horas los 365 días del año para hacer los cateterismos en infartos de corazón.
Además, también se le considera de referencia en la comunidad gallega en áreas como Quemados y Lesionados Medulares, donde cuenta con uno de los gimnasios y zonas de recuperación más destacados de todo el mundo y cuyo coste superó el millón de euros. También en Neurología son líderes y disponen de una sala biplano, mientras que el Digestivo destaca el gran equipamiento de su unidad de Endoscopia: así como las nuevas instalaciones para Enfermedades Infecciosas, que han sido construidas de forma que la presión del aire en las habitaciones impide la entrada o salida de gérmenes, para blindarla contra los contagios.
En el terreno de la organización, el Chuac fue también el primero de España en poner en marcha lo que entonces se denominó la gestión clínica o áreas de gestión clínica (ya en época de conselleiro de Sanidade Romay Becaría), que hoy ha derivado en lo que denominan la gestión por procesos clínicos. Además, es uno de los pocos complejos que cuenta con un Hospital de Día de Psiquiatría, en el pabellón Fernández Latorre de Oza, y situado muy próximo al Museo Quirúrgico.
Lucha contra el cáncer
Otro de los bastiones de la sanidad coruñesa está en el Centro Oncológico de Galicia. Aunque es una fundación, funciona de hecho como un hospital casi integrado en la red pública, y el Sergas le deriva prácticamente todos los tratamientos de radioterapia no solo de A Coruña, sino también buena parte de Lugo y Ferrol. Lo más destacado de estas instalaciones es que cuentan con los equipos básicos para tratar los distintos cánceres, como la bomba de cobalto, la gammacámara y dos aceleradores lineales. El año que viene está previsto que sustituyan uno de los aceleradores por otro de última generación, con capacidad para tratar tumores más pequeños.
También existen otros hospitales de carácter privado, como el San Rafael, el Teresa Herrera, el Modelo y el Belén, que ofrecen los mejores servicios en su especialidad, y que cuentan con la últimas tecnologías para ofrecer una mejor atención al paciente. Tampoco hay que olvidarse de los trece centros de salud integrados en el Sergas, en los que trabajan cerca de 500 personas, y que dan cobertura médica a todos los barrios de la ciudad. La Cruz Roja y el 061 también se unen a esta labor, al igual que los distintos centros gerontológicos, que se ocupan de atender a las decenas de personas de la tercera edad que hay en la ciudad.
En el área de la sanitaria, la ciudad cuenta con la Facultade de Ciencias da Saúde, donde además de esta titulación, se imparte Fisioterapia y Enfermería a más de 650 estudiantes. A todos ellos hay que unir los 130 alumnos de cuatro, quinto y sexto curso de Medicina que vienen a realizar sus prácticas al Chuac, aunque dependen de la Universidade de Santiago, y no de la de A Coruña.