Isidro Mariño (50) es el patrón del Chasula, la embarcación que esta semana ha recorrido la ría de Camariñas cargado de estudiantes de primaria. El objetivo de esta actividad era inculcar a los más pequeños la cultura marinera y que conocieran, de manos de los profesionales del sector, en qué consiste el trabajo de un pescador. Pero además de participar en este proyecto educativo, Mariño se dedica a restaurar embarcaciones en desuso.
-¿Qué le ha parecido la experiencia de trabajar con niños?
-Es muy gratificante, ya que hacen que te sientas bien. La experiencia ha sido muy buena, ya que se han portado bien y han sido muy respetuosos en cada una de las actividades que hemos realizado con ellos. La verdad es que ha sido una experiencia bonita.
-¿Conocen, verdaderamente, el mar los escolares de Camariñas?
-Hay de todo, pero lo cierto es que nos hemos encontrado con alumnos que conocían las partes de la embarcación y el trabajo que se hace en ella lo que es muy normal, pues siendo niños de costa... Lo que sí es cierto es que también existe desconocimiento.
-¿En qué consistió el taller?
-Por una parte, les explicamos cómo era la vida en el mar y las diferentes artes de pesca. Todo a bordo del Chasula, esta embarcación que restauramos como aula didáctica en la que los chavales aprenden y se divierten.