Patronal y corporación sonenses rechazan la superficie prevista por la Xunta para el polígono

Javier Romero Doniz
Javier Romero NOIA/LA VOZ.

BARBANZA

19 sep 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

La necesidad que tiene Porto do Son de un parque empresarial es tal que ha conseguido aunar sobre un mismo proyecto tanto a la totalidad de formaciones políticas que integran la corporación municipal como a la Asociación Sonense de Empresarios. Así quedó refrendado en un encuentro que mantuvieron en la noche del pasado viernes, a iniciativa del colectivo empresarial, y en donde se acordó que la primera medida que llevarán a la práctica será solicitar una reunión con la Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Infraestruturas.

Uno de los objetivos de este encuentro, requerido en dos ocasiones durante el último año sin obtener respuesta desde Santiago, es la modificación de los plazos y superficie que el Ejecutivo de Feijoo baraja para la superficie empresarial de esta localidad barbanzana. Cabe recordar que en los últimos días, el mismo departamento autonómico desveló en el Parlamento que prevé una extensión total de 50.000 metros cuadrados, de los tan solo 27.500 serán útiles. Ante esta situación, el presidente de la patronal, Luis Oujo, fue claro al expresar que «es un error los metros que la Xunta pretende destinar, ya que hay una empresa que solo para ella ha demandado 20.000 metros».

Otro punto común alcanzado y que será expuesto en el solicitado encuentro con el conselleiro Agustín Hernández, está relacionado con la necesidad de dotar de infraestructuras a la zona, ya que como comentó Oujo, «un polígono sin comunicaciones, es un polígono muerto». En este sentido, tanto desde la patronal como desde la corporación municipal entienden que es necesario agilizar el proyecto de la variante de Portosín con el objetivo de que esta población no se convierta en un embudo de acceso a este dilatado polígono.

Zona portuaria

La patronal también aprovechó la reunión para analizar la reunión mantenida esta semana con Portos de Galicia sobre la remodelación de la fachada marítima. Entre otras iniciativas, acordaron presentar un diseño para evitar que las terrazas se vean afectadas por las molestias provocadas por el viento.