La construcción de una casa en O Pozo enfrenta al Concello de Porto do Son y a una vecina del municipio

V. Lagares

PORTO DO SON

12 ago 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

La edificación de una vivienda en Portosín, concretamente en el lugar conocido como O Pozo, tiene en jaque a Rosa González, una vecina que lleva meses instando al regidor sonense, Manuel Tomé, a que paralice los trabajos de construcción. ¿Por qué? Según indica González, los propietarios de la casa le están dando más altura de la permitida en las normas urbanísticas del Ayuntamiento. Además, indica que la vivienda no cumple la distancia reglamentaria de la propiedad donde ella reside.

Al parecer, la guerra entre el Concello y esta vecina de Portosín comenzó en el año 2006, cuando las obras para levantar la vivienda comenzaron. En ese momento avisó al Ayuntamiento porque, según ella, el edificio no estaba separado de su propiedad «os tres metros que obriga a lei, ademais de que se lle estaba dando máis altura da permitida», dijo Gómez. Una vez hecha la reclamación, el Concello de Porto do Son dictó una orden de paralización. Pero ahora, dos años más tarde, las obras continúan.

«O alcalde díxome hai uns meses que as obras seguían paradas, e agora fun o outro día a falar con el e xa me di que hai un ano que lle deron permiso para seguir porque os propietarios presentaron unha modificación do proxecto. Sen embargo a vivenda segue no mesmo sitio e coa mesma altura», indica González, quien asegura que si el regidor no toma cartas en el asunto está dispuesta a ir al juzgado.

El regidor contesta

Por su parte, Tomé aseguró que la paralización de la obra se levantó hace un año porque los propietarios presentaron un proyecto modificado. Asimismo, el regidor instó a Rosa Gómez a que presentara una reclamación para que se revisara el asunto, algo que según dijo la vecina ya hizo. «Ahora los técnicos municipales tienen que estudiar el caso», señaló Tomé.