La propuesta del ministro de Industria, analizada en un vídeo por Juan Ares y Juan Torrón, los especialistas en motor de La Voz.
27 nov 2008 . Actualizado a las 20:16 h.El ministro de Industria desveló ayer la nueva arma secreta del equipo de Zapatero contra la crisis: la risoterapia. Qué mejor estrategia para curar las heridas de la automoción que repetir en Galicia el mismo chiste del cochecito eléctrico que ya le espetó en Valladolid a los parados de Renault, tras inventárselo delante de los casi 3.000 operarios regulados en la fábrica catalana de Nissan. Y qué acierto el de Miguel Sebastián apelando al I+D. El ministro sabe -pero no dijo- que los coches eléctricos ni siquiera están a la última, porque ahora se llevan más híbridos. Ni explicó cómo obrará el milagro de que tres plantas distintas (y de la competencia) fabriquen un mismo coche, o peor aún, tres distintos. Ni quién pagará la costosa adaptación de sus líneas de montaje. Ni habló de cómo y dónde vender estos carísimos vehículos. Y todo sin que las marcas tengan siquiera noticia de sus planes. ¡Para troncharse!