La crisis paraliza la cubierta de la piscina y el centro de día cambadés

Maruxa Alfonso Laya
M. Alfonso VILAGARCÍA / LA VOZ

AROUSA

Dos grandes proyectos del Concello sufren las consecuencias de la situación económica

01 oct 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

La crisis económica se ha llevado por delante dos de los grandes proyectos del equipo de gobierno de Cambados. El cambio de la cubierta de la piscina y el centro de día deberán esperar a que soplen vientos más favorables para poder seguir adelante. Y es que ni hay fondos en la secretaría xeral de Deporte, encargada de financiar la mejora de la infraestructura deportiva, ni en Agader, a quien el Concello iba a reclamar la inversión necesaria para construir un espacio para los mayores de la localidad. Estas son las primeras consecuencias de una crisis que ya ha obligado al Concello a tomar medidas con un único fin: recortar la lista de gastos.

Si hacemos caso al equipo de gobierno cambadés, las arcas municipales no se encuentran en una situación crítica. El Concello acaba de aprobar unos presupuestos de 8,2 millones de euros y se encuentra inmerso en un plan de saneamiento económico y financiero. La deuda municipal ronda los cuatro millones de euros, de los cuales 3,8 millones se adeudan a los bancos y, el resto, a los proveedores. Pero teniendo en cuenta que los ingresos no cesan de caer, y que en los próximos años habrá que devolver al Estado alrededor de 600.000 euros, el Concello se está preparando para afrontar tiempos peores. Actualmente se está realizando un estudio de costes, para tratar de reducirlos, y se promulga la austeridad en las inversiones.

La receta es la misma en todas las administraciones y, por eso, dos proyectos se han quedado en el tintero. La Xunta se ha visto obligada a paralizar la licitación de las obras de mejora de la piscina, pues se ha quedado sin fondos. El alcalde, Luis Aragunde, no se cansa de repetir que el proyecto solo ha sufrido una pausa, y que el próximo año estará en marcha. No dice lo mismo del centro de día. Iba a ser financiado a través de la Axencia Galega de Desenvolvemento Rural (Agader), que recibe fondos del ministerio. Este último ya ha anunciado que esas partidas también se recortarán.