Los alumnos del IES de A Illa secundan abrumadoramente la huelga indefinida

maría santalla VILAGARCÍA / LA VOZ

AROUSA

Solo tres estudiantes asistieron ayer a la primera jornada de clase del curso

20 sep 2011 . Actualizado a las 11:59 h.

Tras la manifestación del pasado viernes, padres y profesores del instituto de A Illa decidían en asamblea iniciar una huelga indefinida hasta que Educación acepte sus peticiones. Ayer era la primera jornada afectada por esa convocatoria y lo cierto es que el paro fue secundado de forma mayoritaria. Solo tres alumnos de los más de 160 que tiene el centro acudieron y recibieron clase con normalidad.

Mientras, padres y docentes esperaban desde el departamento autonómico noticias que no llegaban. La única novedad del día era que, tal como se había prometido, comenzaron en el centro las obras para habilitar espacio para dos aulas nuevas, una en la vivienda destinada al conserje, que no se utiliza, y otra a partir de la unión de dos departamentos para profesores.

Una vez que la demanda de más aulas va camino de ser satisfecha, quedan pendientes otras dos cuestiones que la comunidad educativa considera imprescindibles. Por una parte, la dotación de un nuevo profesor a media jornada y, por otra, la creación de un segundo más, de manera que haya tres en lugar de dos. Educación se comprometió a analizar estas demandas y a dar una respuesta en breve. De hecho, desde el gabinete confirmaban ayer que están estudiando el caso.

Reunión con el conselleiro

A última hora de ayer se celebró una nueva asamblea de padres y profesores para estudiar la situación y decidir si se tomaban o no nuevas medidas de protesta. En la reunión se palpó un gran enfado con el jefe territorial de Educación, quien quedó de responder a sus demandas antes del viernes y el lunes todavía no había contestado. Así que decidieron continuar su lucha como la habían empezado, solicitando una reunión urgente con el conselleiro de Educación, Jesús Vázquez. «Esta persoa -el jefe territorial- xa non nos inspira confianza» y «non podemos deixar que os nosos fillos sexan tratados como gando» fueron dos de las conclusiones de los padres.