La directiva de la agrupación de marisqueo a pie de Carril acudió ayer tarde a la comisaría de policía de Vilagarcía para presentar una denuncia por los hechos ocurridos alrededor de las cinco de la tarde. Según relató la presidenta del colectivo, Milagros Touriño, una mariscadora sufrió una agresión leve y otra recibió amenazas de muerte por parte de familiares de furtivos. Ocurrió después de que la agrupación diera aviso al servicio de vigilancia y a la policía de que había furtivos trabajando en los bancos de O Lombos do Ulla.
Este aviso hizo posible que se intervinieran unas partidas de marisco y dos rastros, pero los mariscadores ilegales se dieron a la fuga. No se acabó ahí el episodio. Cuando los vigilantes marcharon, un grupo de personas, que desde la directiva identificaron como familiares de los furtivos, se acercaron a las mariscadoras, golpeando a una de ellas e insultando y amenazando a otra.
La agrupación decidió poner estos hechos en conocimiento de la policía «porque temos medo do que nos poida pasar», según indicó la presidenta.