El Ateneo Mar de Arousa resucita su «Café Filosófico»

Begoña Paso

AROUSA

La cafetería Parada, en la plaza de la estación de tren, recupera desde esta noche la sana costumbre de pensar

19 feb 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

Hace tiempo, no demasiado, los cafés filosóficos impulsados por Jesús Merino vivieron su particular edad dorada en Vilagarcía. Una veintena de personas se reunían mensualmente para hacer algo cada vez menos frecuente: pensar en común, debatir, enfrentar argumentos de forma civilizada y escucharse mutuamente. La constitución del Ateneo Mar de Arousa desplazó el punto de mira hacia otros objetivos igualmente interesantes, como las jornadas de divulgación científica que acogía la cafetería La Marina. Ahora, de nuevo con las pilas cargadas y englobado dentro de las iniciativas del colectivo vilagarciano, vuelve con fuerza el Café Filosófico.

En esta nueva andadura, el foro de pensamiento muda de escenario. El nuevo foro es el café restaurante Parada Arousa, ubicado en la plaza de la estación de tren.

¿Menú para filósofos?

Son varias las ventajas que ofrece el establecimiento que regentan César Rodríguez y Diana Padín. Se trata de un local con amplitud suficiente, dispone del aliciente de servir bocadillos y cenas, porque la mens sana requiere siempre un corpore razonablemente enchento. Incluso, aseguró ayer Diana, la posibilidad de un pequeño menú filosófico, especial para los contertulios. El aparcamiento es, además, fácil.

El caso es que la primera cita de esta segunda edición del Café Filosófico tendrá lugar esta misma noche, a partir de las diez. Jesús Merino y Andrea Fernández explican que uno de los principios de la iniciativa es el fomento del debate sin prejuicios de ninguna clase. Ni siquiera de un tema postulado previamente, que pueda condicionar el ánimo y la reflexión de quien se deje caer por el Parada.

Para evitar cualquier tentación en este sentido, y de paso fomentar un funcionamiento absolutamente democrático, los temas serán planteados por los propios asistentes quienes, en el primero de los intercambios de la sesión, decidirán cuál de ellos merece ser abordado por la comunidad filosófica. Nada, garantiza Merino, de aprovechar la ocasión para desgranar vida y milagros de un Hegel o un Kant. Así que, cierra, lector, el facebook un rato y ven a dialogar en persona.