Vecinos de Cambados protestan por la proliferación de excrementos de canes

AROUSA

14 feb 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

La proliferación de excrementos de perro en las calles de Cambados ha despertado la indignación de los vecinos de algunos barrios. Los residentes de la calle Albariño, en pleno casco urbano, fueron los primeros en denunciar una situación que, actualmente, se ha extendido por buena parte del casco urbano como el paseo marítimo o el entorno de San Roque y Os Olmos. La situación ha llegado a tal punto que algunos residentes han decidido colgar carteles pidiendo a los propietarios de las mascotas que, por favor, recojan la suciedad que generan sus animales.

Cada vez es más frecuente ver a los vecinos de la localidad sacando a pasear a sus mascotas. Y cada vez más, también, se puede comprobar como muchos de ellos utilizan una bolsita para recoger sus excrementos. Sin embargo, siguen siendo muchos los que prefieren olvidarse de limpiar esa suciedad y se dan media vuelta en cuanto el animal termina de hacer sus necesidades. De ello dan buena fe los residentes en las calles Albariño y Pays de Doll. A pesar de la reciente remodelación que se ha acometido en el primero de estos viales, lo cierto es que actualmente ofrece una imagen de suciedad que resulta lamentable. Hace ya meses que los residentes se quejan porque los propietarios de las mascotas no recogen sus excrementos.

El problema se ha extendido, ahora, a las calles cercanas. El nuevo jardín que se ha construido entre los viales de San Roque y Os Olmos se ha convertido en un lugar ideal para pasear a las mascotas. Y ello ha derivado el problema de la suciedad que estas generan a este entorno.

Carteles de denuncia

Los propietarios de viviendas en esta urbanización han optado, en primer lugar, por pedir a los dueños de animales que tengan más cuidado. Desde hace una semana, en la calle pueden leerse unos simpáticos carteles en los que se explica «esto no es un wc canino» y que, por favor, se recojan los excrementos de los perros. Pero la situación no afecta solo a este entorno. En el paseo de marítimo de la localidad -otro lugar de encuentro para los propietarios de mascotas- también son cada vez más los que no recogen la suciedad que generan los perros, provocando así serias incomodidades a los vecinos.

Hace ya algunos años, el Concello de Cambados instaló los Toliekan, unos monolitos en los que se podían recoger bolsas de plástico en las que depositar los excrementos de las mascotas. Pero a día de hoy las dos instalaciones de este tipo están completamente abandonadas y ya no ofrecen ningún servicio. Aún así eso no es excusa para que los propietarios de las mascotas no limpien adecuadamente la suciedad que estas generan a diario.