En torno al 60% de los profesores de los centros de estudios de la comarca secundaron la huelga en contra del decreto del gallego que promueve la Xunta. La media, sin embargo, no expresa la variedad de datos que aportó cada centro, porque hubo algunos, como A Pastora y Castrelo, en Cambados, o el colegio Piñeiriño y el centro de educación especial de Vilagarcía, donde prácticamente todos los docentes secundó el paro, y tan solo los servicios mínimos funcionaron en los centros educativos. Al otro lado de la balanza, los colegios de Rubiáns o el centro rural agrupado de Valga, donde la huelga no tuvo incidencia. También fue escasa en el colegio de Carril, con un 20%, y el de Vilaxoán, con un 30%. Tampoco la secundaron los centros concertados. Al menos en el de las Franciscanas, en Vilagarcía, ningún profesor hizo huelga.
Los datos tampoco coinciden si se compara la incidencia en los centros de Primaria y en los de Secundaria. En general se sumaron a la huelga más profesores de los colegios que de los institutos. Si la media en los primeros ronda el 63%, en los segundos estuvo en torno al 57%.
También fue desigual la asistencia de alumnos, aunque en general, en aquellos centros en los que faltaron más profesores, también el número de alumnos fue menor. De hecho, hubo algunos en los que la actividad prácticamente se paralizó por no haber estudiantes que atender, sobre todo en los institutos.
Muchos profesores que se posicionaron en contra del decreto que prepara la Xunta sobre el uso y la enseñanza de las lenguas en educación asistieron a la manifestación convocada en Santiago. En los institutos se invitó a los alumnos a sumarse a la convocatoria. De hecho, algunos estudiantes del Castro Alobre cogieron el tren para acudir a la movilización. También lo hizo la edila Susana Camiño.