Un joven, en estado crítico al ser atropellado en Vilaxoán sobre una acera mientras hacía «footing»

La Voz

AROUSA

16 jul 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

La calle Víctor Pita, a su paso sobre la playa de Canelas, en Vilaxoán, se convirtió ayer en el escenario del octavo atropello que registra el municipio de Vilagarcía en lo que va de año. La víctima del siniestro es Guillermo Renda, un vecino de la capital arousana de 25 años de edad, que fue arrollado violentamente por un automóvil cuando hacía footing tranquilamente sobre la única acera de que dispone la vía en este tramo. El herido fue trasladado en estado crítico al Hospital Xeral Cíes, en Vigo, por una ambulancia medicalizada del 061.

El accidente tuvo lugar hacia las ocho y cuarto de la tarde. Un Mini Cooper con matrícula 5814 GGM en el que viajaban cuatro chicas muy jóvenes, según testigos de lo ocurrido, se dirigía hacia Vilagarcía. Al trazar la última curva antes de la recta de la depuradora, la conductora, de tan solo 18 años de edad y vecina del barrio de O Rial, perdió el control del vehículo, que montó la acera y derribó dos árboles y una farola para, finalmente, atropellar a Guillermo Renda, que en aquel momento hacía deporte junto a un amigo.

Los Bombeiros do Salnés, la Policía Local y tres ambulancias, una de ellas de Protección Civil de Vilagarcía, atendieron al herido. La víctima del atropello, miembro de la conocida familia Carrachaza, propietaria de un establecimiento de loza en el centro de la ciudad, se encontraba consciente, pero su estado era grave, habiendo sufrido un fuerte impacto en la cabeza. El helicóptero del 061 no pudo ser utilizado, puesto que estaba siendo objeto de procesos de mantenimiento.

Las bandas rugosas no estaban

Mientras los familiares del atropellado acudían al escenario accidente, varios de los testigos que se agolpaban en el lugar se preguntaban qué ha sido de las bandas rugosas que impedían la circulación a altas velocidades en un tramo tan peligroso como el de Canelas. Al parecer, fueron retiradas para asfaltar la vía y no llegaron a ser repuestas. Porque si algo creían los presentes es que el automóvil transitaba a demasiada velocidad al tomar la curva.