Cambados limpia la tumba de la familia de Valle-Inclán

AROUSA

Operarios municipales pulieron y repintaron las lápidas de la mujer y del hijo del escritor vilanovés

18 sep 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

El Concello de Cambados ha acometido esta semana el acondicionamiento y limpieza de las tumbas de la familia de Valle-Inclán. Tanto la mujer como el hijo del escritor descansan en el cementerio de Santa Mariña pero, desde hace algún tiempo, sus lápidas estaban algo descuidadas. Con estos trabajos el equipo de gobierno atiende una petición de Amigos de Valle-Inclán, que había reclamado la mejora de este entorno.

La asociación valleinclaniana había remitido un escrito al Concello para solicitar que se mejorara el entorno en el que reposan los restos de la familia de Valle-Inclán. Explicaba, además, que la zona podía constituir un atractivo turístico y que, por ello, era preciso proceder a su acondicionamiento. Con su propuesta estuvo de acuerdo el equipo de gobierno, que se comprometió a reparar el entorno de las lápidas.

Esta misma semana, operarios municipales acometieron las tareas de acondicionamiento. Limpiaron, pulieron y repintaron las tumbas de Josefina Blanco Tejerine y de Joaquín María Valle-Inclán Blanco, mujer e hijo del ilustre escritor vilanovés. Además, también se han colocado flores en ellas.

Con todos estos trabajos se pretende facilitar la identificación de estas lápidas ubicadas en el recinto sagrado del cementerio de Santa Mariña. La tumba de Joaquín María, fallecido en 1914, se encuentra ubicada al lado del altar mayor del templo de Santa Mariña. La de su madre, en cambio, está ubicada a la izquierda de la entrada del cementerio. Ahora sus nombres pueden leerse claramente.

Son muchas las personas que se desplazan allí buscando los restos de los familiares del autor. Estudiosos y admiradores de la figura de Valle-Inclán visitan Cambados, pues el escritor vivió en este municipio entre 1912 y 1917. Su familia fue acogida por doña Lucinda Fernández Soler en el barrio de Fefiñáns. También vivió un verano en la casa de la calle Carreira, de su amigo José González Fraga. En Cambados vivió Valle su mayor alegría, el nacimiento de su hijo, y su mayor tristeza, el fallecimiento del mismo en la playa de Fefiñáns.