Esta tarde se celebra la reunión de la comunidad vecinal -42 propietarios- afectados por la orden de demolición de rochos en la calle Irmáns Moreno Ulloa de Ribadeo. La obra la debe ejecutar el Concello antes del 31 de marzo y hoy los afectados debatirán qué medidas tomar. Entre los puntos del orden del día figura el de denunciar otros edificios ilegales de Ribadeo y reclamar al Ayuntamiento y al promotor que ejecute la demolición daños y perjuicios por los desperfectos ocasionados o que puedan darse en el futuro. El debate está abierto.
Son muchos los flecos pendientes. Por ejemplo, ¿quién va a cubrir de nuevo el edificio? El Concello solo tiene orden de derribar el exceso construido. que en su punto más alto sería de un metro y medio.
Ayer en la tertulia de Onda Cero A Mariña participaron tres vecinos afectados. Uno, Suso Villalba, como propietario de un garaje y como miembro de la comunidad denunciante. Otros dos, Alfonso Rodil y Azucena González Loredo, propietarios de pisos en el inmueble donde se va a ejecutar la demolición. De sus comentarios se desprende que de aquí al 31 de marzo va a haber no poco debate y polémica.
«Esta denuncia chega aquí polo interese da parte denunciante de seguir adiante ata o final», manifestó Azucena González, que añadió: «O que parece é que este edificio ten cinco pisos de máis. Pois non». «¿E para qué subiu as paredes de máis?», preguntó Villalba. «Este edificio non ten nada especial respecto a moitísimos que hai en Ribadeo, e na misma rúa», añadió Azucena González. «Ten unha diferencia, que hai unha denuncia e unha sentenza (...) e denunciouse cando se estaba construindo», puntualizó Vilalba. «Eu comprei e cando fun rexistrar non había cargas no Rexistro», señaló Rodil. «¡Non serán culpables os que denuncian!», dice Vilalba. «Son culpables por seguir adiante cando teñen unha pérdida de visión dun metro. A denuncia foi contra o promotor e nós somos agora os afectados», refutó Azucena González. «E cando toda a rúa está igual», concluyó Rodil. Hay debate.