Si el presidente de Portos de Galicia, Jacinto Parga, se fue con las manos vacías tras su visita a Ribadeo para lograr adeptos al proyecto de la nave en el muelle comercial, ayer, en la resaca de sus manifestaciones, arreciaron las críticas. La oposición, notable en Galicia, se dispara en Asturias y el proyecto amenaza con abortar la luna de miel que viven Xunta y Principado con sus dos actuales presidentes, ambos socialistas. Desde el PP astur, el diputado autonómico Marcial González, calificó los trámites iniciados por Portos de Galicia como «una bofetada en toda regla», del mandatario gallego, Emilio Pérez Touriño, a su homólogo asturiano Vicente Álvarez Areces.
Marcial González puso en tela de juicio la credibilidad de las cumbres asturgalaicas y recordó que en la recientemente celebrada en Santiago se acordó constituir un órgano gestor común de la ría. En ello coincidió el dirigente socialista asturiano Fernando Lastra. Sobre las manifestaciones de Jacinto Parga, en el sentido de que en Portos no habían recibido ninguna solicitud del Principado para mantener una reunión urgente sobre el proyecto de la nave, Lastra insistió en que sí ha sido solicitada.
El alcalde de Castropol, José Ángel Pérez (PSOE), recordó que el «canal entre Castropol y Figueras está prácticamente cerrado y cualquier actuación en la zona gallega vendrá a erosionar más ese tráfico». Pérez ignoró las obras que se están acometiendo en la actualidad para ampliar el muelle deportivo y comercial de Figueras y el proyecto pendiente para aumentar amarres en Castropol.
Juan Santiago (PSOE), primer teniente de alcalde de Vegadeo, apuntó: «La ría es de todos y por lo tanto ninguna de las partes que intervenimos en ella podemos apropiárnosla».
El secretario de la cofradía de pescadores de Figueras, Joaquín Fraga, señaló ayer: «Cuando estamos intentando desde ambos lados una gestión común de la ría, esta obra podría tener un impacto muy negativo».
La reacción más moderada llegó de Gervasio Cao, presidente del club náutico y de la asociación de comerciantes de Ribadeo, quien insistió en que se están haciendo pronunciamientos precipitados: «De momento non hai proxecto. Cando o haxa haberá que valorar pros e contras».
La cofradía de pescadores de Ribadeo convocó a las mariscadoras de Rinlo, armadores y marineros a una reunión. El patrón mayor, Domingo Fernández, dejó clara la postura: «Opoñémonos ó proxecto e así llo comuniquei a Portos de Galicia».