El centenario deValadouro Eduardo Goas todavía conserva coche y carné

I. E.

A MARIÑA

Este maestro jubilado que vive en la parroquia de Recaré acaba de cumplir un siglo de vida disfrutando de buena salud, mejor humor y con las facultades impecables

16 abr 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

El alcalde de O Valadouro, Eulogio Fernández Sampayo, entregó este fin de semana una placa de homenaje a Eduardo Goas Lorenzo, un vecino de Recaré que cumplió el 9 de abril los cien años y que, casualidades de la vida, fue profesor suyo en aquellas clases nocturnas con las que antaño se intentaban suplir las carencias educativas que sufría la mayor parte de la gente.

Sampayo, con 80 años a punto de cumplirse, recordaba ayer que Goas era «un bon maestro» y que todavía hoy se mantiene activo y se entretiene cultivando la huerta.

Activo y con buen humor si que se mantiene este centenario que ayer mismo nos contaba que a su fiesta de cumpleaños, que le celebraron el pasado día 12, con un poco de retraso por cuestiones de trabajo de su prole, acudió toda su familia, incluidos los hijos que tiene fuera e incluso un biznieto.

Según nos contaba ayer, en la actualidad tiene buena salud; tanta que con cien primaveras a cuestas asegura que si no conduce es porque se lo pidieron sus hijos y quiere complacerlos ya que, por su parte, sigue manteniendo al día su permiso de circulación y su coche y personalmente cree que si se pusiera al volante conduciría igual que hace veinte años.

Lector empedernido

Otra de las aficiones que más disfruta es la lectura; manifiesta que hasta hace muy poco leía muchísimo, aunque ha bajado bastante el ritmo debido a un problema que tuvo en un ojo. También mantiene el gusto por la baraja, afirma que «non era doado gañarme» y que ahora sigue echando las partidas en casa, a donde acuden a acompañarle algunos de los que fueron alumnos suyos antaño.

No hace mucho tiempo, durante una de las fiestas que el Concello de O Valadouro organiza a los jubilados del municipio, nos contaba que si volviera a nacer y sabiendo lo que sabe, elegiría la profesión de maestro que tuvo, ya que nada le parece más grande que enseñar a los jóvenes y ayudarles a encauzar su vida. Y es que Eduardo Goas ejerció en la enseñanza desde los 23 a los 70 años y la mayor parte de este tiempo los pasó en Lagoa y Recaré. Es en esta parroquia, en la que fue la casa patrocial, donde vive ahora. Se las apaña solo, con ayuda de dos personas que acuden por la mañana y por la tarde a echarle una mano y gracias a la compañía que le brinda uno de sus hijos, que vive muy cerca de su casa.

Aseguraba Eduardo Goas hace poco que una de las cosas que lo llenan de orgullo es ver que alumnos suyos acabaron desempeñando como médicos, abogados o ingenieros. Pues solo queda felicitarlo y que siga disfrutando de su buena salud.