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Desayuno de domingo con...

Marta Larralde: 'No creo que haya padres preparados para la adolescencia de su hijo'

Vigo (1981). Estudié Imagen y Sonido, hice prácticas como regidora y auxiliar de dirección, pero la interpretación vino a mí y, desde hace años, trabajo como actriz; ahora, en la serie 'HIT', en TVE. 

Por Virginia Drake
Fotografía: Javier Ocaña

Domingo, 05 de Diciembre 2021

Tiempo de lectura: 2 min

XLSemanal. Aquello de «mamá, quiero ser artista» nunca fue con usted.

Marta Larralde. Jamás quise ser actriz: se presentó una oportunidad, abrí esa puerta y me fascinó este mundo.

XL. En HIT conduce el autobús del colegio. ¿Su primera vez con semejante vehículo?

M.L. Sí y, aunque se diga que «mujer al volante, peligro constante», he demostrado conducir muy bien un autobús de los setenta: las marchas son muy duras y requiere dar golpes muy fuertes a la palanca de cambios, sobre todo si debes meter la marcha atrás.

XL. Que le convaliden el carné tras la serie.

M.L. Eso espero [ríe]. Como el de actriz es un trabajo muy inestable, cuando no tenga nada a la vista, conducir autobuses va a ser mi plan B [ríe].

XL. Francis (su personaje) está separada, vive en el campo con un hijo adicto a las pantallas y al porro. ¿Training para cuando su hijo de cuatro años sea adolescente?

M.L. Tras ver los problemas planteados en la serie, no creo que haya padres preparados para la adolescencia de su hijo; todos iremos aprendiendo sobre la marcha. Aunque puedas imaginar cómo será, la realidad nos golpeará. Cada día surgen peligros y drogas nuevas.

XL. Los alumnos que enfrenta HIT en el aula y Francis en el autobús no dejan un conflicto sin tocar: faltas de respeto, indisciplina, maternidad adolescente, violencia, adicciones, homofobia, bullying...

M.L. ¡Un completo para bingo! Y añade fracaso escolar, problemas de salud mental, de radicalización política… Al final es reflejo de la sociedad, de los adolescentes que tenemos y de los padres, que también tienen lo suyo.

XL. ¿Martirizó en esa etapa a sus padres?

M.L. No demasiado. Siempre fui muy responsable, sacaba buenas notas, nunca me he drogado, pero no era una santa: me gustaba mucho salir, llegar a casa al amanecer… Mi madre llamó alguna vez a la Policía porque no aparecía.

XL. Vivió unos meses entre San Francisco y Los Ángeles y acabó haciendo un spot en Hollywood. ¿Le tentó quedarse allí?

M.L. No, podía haberme quedado algo más, pero no me apetecía. Fui a aprender inglés y a vivir la vida, no con la idea de trabajar allí: con trabajar aquí soy feliz, no tengo otra ambición.

XL. Fantasee, ¿qué le gustaría en 2022?

M.L. Nominación al Goya por Olvido y León, que HIT fuera premiada como la mejor serie, hacer algo de teatro y que sea un año en el que mi mesilla de noche esté llena de guiones. Me han rechazado muchas veces y me da mucho miedo la inseguridad de esta profesión, pero también me han cogido otras tantas.

«Café con leche; tostada de pan de centeno con aguacate; y un kiwi o una manzana. Que mi marido me lo prepare cada mañana le da un plus de sabor».

Etiquetas: actores españoles