El Banco de España recomienda concentrar las ayudas de los ERTE en las empresas solventes

El Banco de España ha entrado de lleno en el debate sobre la prórroga de los ERTE. Y lo ha hecho para pedir que se racionalice el gasto en vista del enorme estrés que sufrirán las cuentas públicas. Por eso si director general de Economía, Óscar Arce, abogó hoy por «focalizar» más el diseño de los ERTE y el desembolso de las ayudas hacia las empresas con más papeletas de seguir siendo viables después del impacto de la pandemia. Y es que hasta ahora no se discriminaba en función del estado de salud de las firmas, por lo que algunas con problemas estructurales han podido posponer con los ERTE un final que será, en cualquier caso, inevitable. 

Durante la presentación de las proyecciones hasta 2022, Arce evitó pronunciarse en torno a la extensión de este escudo social que protege aún hoy a unos 800.000 trabajadores. Gobierno, patronal y sindicatos siguen negociando su prórroga más allá del 30 de septiembre. Aunque admite que siguen existiendo motivos para extender las ayudas, subrayó que estas se han dilatado más de lo previsto inicialmente y por lo tanto requieren un mayor esfuerzo de diseño para llegar a los que realmente lo precisan, recoge EFE. 

Por eso cree que será necesario encontrar un «equilibrio» entre seguir dando «cierto soporte» a empresas y hogares afectados, pero «con prioridad a aquellas empresas que después de este shock temporal sigan siendo viables». El objetivo es claro: hacer un uso más eficiente del gasto público dejando caer a las empresas que se están sosteniendo de forma artificial con las líneas de ayudas del Estado. Una circunstancia que ya advirtieron otros expertos. Una parte del tejido productivo está aplazando el momento de acudir al concurso de acreedores. 

En la misma línea se manifestó el gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, quien apuntó hoy que el Gobierno «probablemente» tenga que mantener los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) durante un «tiempo prolongado» y que no hay que tener miedo a dicha extensión temporal, según informa Europa Press. Durante su intervención en la Junta Directiva de la CEOE, Hernández de Cos ha puesto como ejemplo lo que hizo Alemania en la anterior crisis económica, donde los ERTE se prolongaron en algunos casos durante dos años. Sin llegar a ese extremo, defiende mantener este escudo para preservar el tejido productivo, eso sí, focalizando las ayudas casi empresa por empresa porque hay sectores, como el turístico, donde se puede dar la situación de ver hoteles cerrados en una acera y justo enfrente otros abiertos y prácticamente llenos. Al respecto, Hernández de Cos ha insistido en que el ERTE no debe ser el único salvavidas al que se aferren las empresas y que  «no son la solución» para los negocios que ya arrastran problemas estructurales y no coyunturales. 

Sobre el ritmo de incorporaciones al mercado laboral de los trabajadores que siguen en ERTE, Arce ha reconocido que cada vez será menor y muchos se quedarán por el camino: «Los trabajadores que no se han incorporado son de sectores especialmente afectados [...] Trabajadores que, siendo realistas, conforme pasa el tiempo pues posiblemente sea difícil que salgan si no lo han hecho ya», sostuvo.