Volver
Animales de compañía

Vocación y mundo

Juan Manuel de Prada

Leo que Sor Cristina, la monja siciliana que alcanzó fama planetaria participando en la variante italiana del concurso musical La Voz, ha colgado los hábitos. Tras abandonar la vida religiosa, Cristina Scuccia –que así se llama la mujer debajo de la toca– se ha instalado en España, donde «sigue cultivando su pasión por la música». En su día, las actuaciones de Sor Cristina en el célebre concurso televisivo se volvieron ‘virales’, concediéndole una efímera fama mundial; pero, como ella misma reconoce en una entrevista reciente, «esta exposición mediática fue el motor de muchos interrogantes» que, durante la plaga coronavírica, «cuando todo se detuvo», se volvieron torturantes. Sor Cristina resolvió entonces que la vida religiosa no la hacía feliz y abandonó el convento, para terminar trabajando de camarera en España. El mundo siempre actúa del mismo modo: primero nos seduce, después nos abandona, después de arruinar nuestra vocación.

Contenido exclusivo para suscriptores
La Voz
Suscríbete
para seguir leyendo
Lee sin límites toda la información, recibe newsletters exclusivas, accede a descuentos en las mejores marcas y muchas más ventajas
Etiquetas:
MÁS DE XLSEMANAL
Los tesoros de la Hispanic Society of America

Así vieron España por primera vez en Nueva York

Por Fernando Goitia
La leyenda negra de los hidratos de carbono

Esclavos de las dietas: ¿cuándo se convirtió la patata en una bomba?

Por Maren Keller
Psicoanálisis canino

¿Qué piensa mi perro? (No, no cree que eres el macho alfa de la manada)

Por Carlos Manuel Sánchez