Ana Polvorosa: «De niña llegué a pensar por qué no sería rubia o morena»

Eduardo Casanova la ha elegido para ser Samantha, una chica con boca de culo, que se mezclará en Pieles con una serie de personajes deformes encabezados por Jon Kortajarena y Carmen Machi, entre otros. Precisamente nuestra exAída explicó antes del rodaje que este filme «va a ser un antes y un después en el cine español», un reto que Ana Polvorosa ya había aceptado en el corto Eat My Shit, que rodó con similar aspecto para Casanova, descrito por Álex de la Iglesia como un «niño-adulto prodigio». Queda claro pues que Ana Polvorosa tiene «ganas de mucho», de arriesgar y de aprender, y que le sobra «seguridad en mí misma, algo de lo que a veces carecemos los que nos dedicamos a este mundo». Si Amar es para siempre le puso en la bella piel de Loli, ella no perderá la cara, como la Lore -con la lengua preparada a la réplica-, sacando su rostro a la pantalla de otra manera más agitadora.

-Esta va a ser una película de alto riesgo.

-Sí, es una película que tiene mucho riesgo, es muy provocativa y cuenta con todo tipo de hándicaps. Pero se está abordando desde la ilusión, las ganas, el esfuerzo, que ha sido lo que ha conseguido sacarla adelante. Creo que va a ser muy espectacular e impresionante.

-¿Te consideras provocadora?

-No, yo prefiero pasar desapercibida.

-Después de estar juntos en «Aída», con Eduardo protagonizaste en su corto «Eat My Shit». ¿Eres su musa?

-Yo creo que en el mundo de Edu, hay muchas musas y muchos musos. No creo que se decante solo por una actriz. Sí es cierto que me admira y me quiere, y me valora como persona y como parte de mi familia, igual que él para mí es parte de mi familia.

-¿Cómo te gustaría impresionarle en este papel, ya que en el fondo tiene similitudes?

-En este papel continúo un poco la línea de Eat My Shit. Pero todo lo que habrá en la película es un mundo muy ajeno a todos nosotros. Pertenece a sus emociones, sus vivencias, es el mundo interno que tiene él y que ve muy claro. Así que él sabe lo que va a sacar de nosotros, que será algo muy bonito porque nos conoce como actores y personas.

-Verte con cara de culo va a ser inusitado, por decir algo?

-El personaje es una mujer que físicamente tiene una deformidad y todo eso le crea unas dificultades y problemas a la hora de relacionarse con la sociedad. Yo nunca he interpretado a nadie con una experiencia tan intensa, por lo que requiere mucha carga dramática. Además también es complicado el hecho de abordar la inseguridad, las carencias y falta de autoestima que tiene Samantha en un mundo que está completamente contra ella.

-¿Alguna vez alguien te ha hecho sentir mal con malas formas?

-La vida es cruel en muchos momentos, empezando por la infancia cuando solo por ser más gordito o tener pecas ya estás perdido. A mí me pasaba con el color de mi pelo. A veces llegaba a pensar por qué no sería rubia o morena y, ahora, me fascina y me enamora. Pero igual que cuando era pequeña, con 28 años sigo viendo las diferencias. Nos hacemos mucho daño los unos a los otros criticándonos.

-¿Y si algún día te dijeran por exigencias del guión: ponte de rubia?

-Por supuesto lo haría. Y si hay que raparse la cabeza al cero, también. Pero para la película de Edu, habría hecho cualquier cosa que me pidiese, todo lo que hiciese falta.

-¿Y qué es lo que más te gusta de ti cuando te miras en el espejo?

-Más que físicamente, cada día tengo más fortaleza y soy más independiente en cuanto a mis valores. Nuestra forma de afrontar, de amar la vida y querer a los nuestros. Los valores es lo que nos hace a cada uno ser especial.

-¿Te comen los nervios?

-Soy una persona muy nerviosa, también a nivel mental. Pienso mucho todo, doy muchas vueltas a las cosas, pero cada día menos porque voy creciendo y madurando. También es que soy muy activa, tengo muchas inquietudes y muchas ganas de mucho.

-¿Qué aportó la Lore a tu vida?

-Muchísimo. He convivido durante siete años con el personaje, así que imagínate. Y a nivel profesional me ha ido impresionando hasta dónde era capaz de llegar interpretando un personaje con una vida tan larga como la suya, que ha pasado por tantos momentos, y cómo he podido llegar a formar parte de eso. De Aída me llevo muchísimo.

-¿Tú también eres de respuestas rápidas, como ella?

- En la vida real me pienso más las respuestas, pero sí puedo tener esa capacidad (dice muy segura).

-¿Dónde notas más tu fuerza interior?

-Yo soy una persona cargada de emociones y sentimientos. Soy muy sensible, todo me afecta mucho. Entonces eso me viene muy bien para mi trabajo y muy mal porque sufro más. Pero para ser actriz tienes que estar cargada de sentimientos.

-¿Qué has ido recogiendo en tu vida hasta ahora?

-En mi vida he ido recogiendo muchas cosas. A nivel familiar tengo unos valores muy sólidos que no voy a perder jamás. La humildad es la base para todo. Y de este trabajo he ido recogiendo mucha profesionalidad, disciplina y seguridad en mí misma, de la que a veces carecemos los que nos dedicamos a este mundo.

-¿Reivindicas tanto Getafe como Penélope Alcobendas?

-Por supuesto, sí, sí, sí. Soy de Getafe y he estado viviendo en Getafe hasta los 18 años así que, hasta entonces, me llevo de allí mis grupos de amigas, mis estudios?. Pero también soy de Madrid. Las dos cosas.