Un químico de la USC logra la beca más competitiva de la UE
Sociedad
Recibe 1,5 millones para intentar atravesar la membrana celular
05 Dec 2015. Actualizado a las 05:00 h.
Es un proyecto en la frontera del conocimiento que combina la química, la biología y los nuevos materiales. ¿El objetivo? Atravesar la membrana celular de forma eficiente y selectiva, lo que abrirá una nueva vía para el tratamiento y diagnóstico de enfermedades. Es algo que la ciencia lleva años buscando, pero nunca con la novedosa estrategia que ha abordado el químico del Centro Singular de Investigación en Química Biológica y materiales Moleculares (CiQUS) de la Universidade de Santiago Javier Montenegro (Vigo, 1979), lo que le ha permitido, junto a su valioso currículo, convertirse en el único gallego en conseguir este año una Starting Grant del Consejo Europeo de Investigación (ERC). Es el programa más competitivo y exigente de la UE para financiar, con 1,5 millones de euros, la investigación de científicos prometedores, como lo demuestra el hecho de que solo se aceptan una de cada diez propuestas. En esta convocatoria solo la ganaron otros once talentos que trabajan en España, a los que hay que añadir otros tres más que lo hacen en el extranjero.
«Estoy encantado, pero soy uno más, con o sin Starting Grant», confiesa Montenegro, que el pasado año ganó un no menos exigente contrato Ramón y Cajal y que aprovechará la ayuda europea para potenciar y consolidar el grupo, ahora pequeño, que ha creado con el apoyo de Juan R. Granja, de quien dependía hasta hace poco.
A diferencia de otras estrategias, lo que en esencia propone el investigador gallego es que sea la propia membrana celular la que facilite la entrada a las moléculas que se quieran introducir en ella, bien para modificar su funcionamiento con los principios activos que se deseen o para realizar su seguimiento y poder así realizar un diagnóstico temprano de enfermedades. ¿Cómo? Dirigiéndole una serie de compuestos químicos, unas miniproteínas llamadas péptidos con capacidad de ser asimilados y adaptados por la propia membrana sin que pierdan su estabilidad química. Es más, la idea es que sea esta la que actúe cómo una especie de molde que los transforme, los ensamble y les abra así la puerta al interior de la célula.
«Queremos que sea la propia membrana la que realice el ensamblaje de las moléculas, y luego ver lo que ocurre», apunta el científico vigués, que durante su tesis realizó estancias en la Universidad de Cambridge y en el Scripps Institute de California, y que tras doctorarse en química en la Universidade de Santiago trabajó durante tres años en la Swiss National Foundation de Suiza antes de incorporarse al CiQUS.
Transporte de fármacos
Acceder de forma selectiva y eficaz al interior de las células es esencial para transportar fármacos que puedan reparar sus daños, algo que en el caso de enfermedades como el cáncer, en las que la quimioterapia es muy agresiva y mata también a las células sanas, sería especialmente útil. Pero, por ahora, Montenegro prefiere mantener la cautela y evitar generar demasiadas expectativas. «Puede ser que esta estrategia no funcione», advierte. Pero es lo suficientemente prometedora como para que la UE apueste por ella.
Montenegro es el noveno científico que trabaja en Galicia (siete en la USC, uno en la Universidade de Vigo y otro en la de A Coruña) en ser distinguido por el Consejo Europeo de Investigación, de los que solo uno, José Luis Mascareñas, el director científico del CiQUS, logró una Advanced Grant dirigida a investigadores sénior.