Un militar, en el banquillo por incluir el móvil de su ex en una web de contactos

Un año y seis meses de prisión por un delito contra la integridad moral es la pena que el fiscal solicita para un militar de la Brilat que, en abril del 2013, colgó el número de teléfono móvil de su expareja en una web de contactos. Además, insta al titular del Juzgado de lo Penal número cuatro de Pontevedra a que le prohíba acercarse o comunicarse con la víctima durante dos años y medio, así como que la indemnice con tres mil euros.

Los hechos que sentará este viernes al pontevedrés en el banquillo se remontan al 6 de abril del pasado año. Aquel día, «actuando con el ánimo de degradar y humillar a su novia», escribió varios mensajes alusivos a la que había sido su compañera sentimental durante siete años.

La repercusión de esta conducta cristalizó muy pronto. Así, a partir de las cuatro menos veinte de la tarde, «la víctima recibió hasta treinta llamadas telefónicas y mensajes a través del sistema Line y WhatsApp de personas que, habiendo accedido a la página ya referida, intentaban contactar con ella, preguntándole si era ella y comentándole que en un chat hablaban de su disponibilidad sexual». Además, «recibió diecinueve llamadas perdidas de distintos teléfonos con número oculto».

El fiscal añade que, «expuesto y humillada, afectada y agobiada por el aluvión de mensajes y llamadas», la pontevedresa, pasadas las seis y cuarto de la tarde, interpuso una denuncia en Comisaría.

Cuartel de Figueirido

En este punto, se reseña que tanto el acusado como su expareja trabajan en el acuartelamiento militar de Figueirido, de tal modo que, «al haberse divulgado allí el contenido de los mensajes, se ha agrandado el sentimiento de humillación de la mujer que, sin pretenderlo, pasó a ser el centro de las habladurías entre los compañeros de trabajo». De hecho, el ministerio público considera acreditado que en mayo del 2013 la pontevedresa inició un «tratamiento psiquiátrico para superar la ansiedad que le ha provocado la situación ya relatada».

Al mismo tiempo, se refiere que el imputado ya fue condenado por un falta de vejaciones injustas, si bien ha recurrido la sentencia.