La Voz de Galicia

El espíritu de la cuarentena llena la rúa Mahón de adornos para el San Xoán

Carballo municipio

Julián fernández carballo / La Voz

Vecinos de la calle Mahón carballesa le ponen color al San Xoán

Los vecinos utilizan plásticos reciclados para hacer flores y alegrar el ambiente

22 Jun 2020. Actualizado a las 17:49 h.

Durante el confinamiento, surgió un envidiable espíritu de unión en la calle Mahón de Carballo. En la cuarentena organizaron un cumpleaños, hicieron una fiesta y dieron agradecimiento público con una pancarta a una joven heroína de la pandemia. Y ahora manifiestan esta unión adornando el barrio para el San Xoán.

Lo hacen con plásticos de todos los colores y orígenes, botellas de lejía, de agua, recipientes de yogures y todo lo que se pueda adaptar. Son unas diez familias las más activas, en total unas veinte personas con sus cuarenta manos a elaborar flores y otros adornos que ya están plasmados en la vía pública para darle vida al San Xoán. Curiosamente, el Concello de Carballo convocó esta semana un concurso para el vecindario. Lo que pretenden en el consistorio es que la gente engalane las ventanas, puertas y balcones con flores y plantas tradicionales y que envíe una foto. Habrá regulados del Eu quero Carballo y se sortearán diez bonos de 30 euros para consumir en los establecimientos locales.

En la calle Mahón quieren aclarar que su iniciativa no tiene que ver con la del Concello, de hecho ya habían comenzado con los adornos cuando convocaron el concurso oficial. Fue algo que surgió durante el confinamiento, pero les gustaría que el alcalde los fuese a ver. Andrea de León, que lleva la voz cantante, lo deja muy claro: «Lo hicimos para nosotros, para darnos alegría». Es fruto de la unión vecinal. «Todo esto lo pensamos en el confinamiento», agrega. Hicieron un grupo de wasap y fueron estableciendo estrategias. Quieren mantener este espíritu y ya piensan en hacer algo para las Navidades. Cada uno aporta sus ocurrencias y entre todos las llevan a cabo. «La pandemia nos hizo conocer mejor a los vecinos», apunta Andrea, que añade que no se trata de «comprar unos objetos en Amazón y adornarlos», sino de crear ideas entre todos.


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