Me gustan las películas de Sebastián Lelio porque me llevan a sitios que no espero, como cuando un amigo te sorprende citándote en un restaurante buenísimo en el lugar menos pensado. Me gustan las películas de Sebastián Lelio porque son incómodas y sus personajes femeninos son fuertes y complejos y con aristas e impredecibles. Me gustan las atmósferas que crea, que son densas e intemporales y únicas. Me gusta la utilización que hace del sonido, del silencio y de la música con su colaborador habitual, Matthew Herbert.
