Mildred Wilson, una viuda de 82 años, participa en las más duras carreras con obstáculos. «Si no puedes con todo –dice–, ¿qué más da? No dejes de intentarlo»
En 2018, su hijo Danny, de 47 años, le pidió que viajaran juntos a Las Vegas, donde él competía en una de las mudder races más duras del mundo, una larga carrera de 24 horas repleta de obstáculos y dificultades por terrenos fangosos. Animándolo a lo largo de toda la competición, Mildred Wilson sintió al verlo que ella también quería participar en retos de ese tipo.
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