La Feria del Disco de Vinilo se reencuentra con Pontevedra

La Feira del Disco de Vinilo abrirá hoy domingo de nuevo sus puertas en la misma ubicación que en los últimos años, el hotel Rías Baixas.

Cuatro stands ofrecerán a los incondicionales del vinilo alrededor de 7.000 referencias, con música de todos los tiempos, aunque el organizador de este evento, Manolo Otero, asegura que las que más demanda tienen son las de música rock de los años 60 y 70.

No esperan una avalancha de público, pero saben que la asistencia será selecta, porque los que siguen apostando por los vinilos tienen claros algunos conceptos que diferencian este formato de otros más compactos o de las descargas directas. Y es esa valoración de los detalles, a juicio de Manolo Otero, lo que ha permitido un resurgir de las prensas de vinilo abriendo mercado a artistas actuales.

«Eu vendo edicións orixinais. Desas nas que o disco ven nunha carpeta cun deseño exclusivo e fotos dentro. Aos meus clientes interésalles tanto o contido como o continente». Para Manolo Otero esa es la clave de la supervivencia del vinilo. «Aos que so lle interesa a música pasaronse ao CD, que lles ocupa menos espacio». Y este tipo de consumidor musical, asegura, se pasó en bloque «ás descargas, que ninguén negará que soan peor porque van moi compactadas».

Reconoce que hay mucha diferencia entre quien disfruta de una canción en un buen equipo de sonido y quien utiliza su móvil y unos cascos para escuchar los temas de moda. «Unha cousa é música e outra ter ruido de fondo para que te acompañe mentras camiñas. Esa é a diferencia principal entre un vinilo e outros formatos».

Por eso, el perfil del visitante de esta Feria del Disco de Vinilo no es un «comprador das últimas novidades»; más bien se trata de un coleccionista que busca algo exclusivo».

Y la edad también influye. «A xente nova non ten o concepto de que haxa que pagar pola cultura. Están acostumbrados a descargar música e libros. Para eles o formato físico non é unha opción. Mudaron ao dixital», explica Manolo Otero. Por ello la Feria pervive gracias a un público que oscila entre los 30 y los 65 años.

La Feria pemite además que todos aquellos que quieran deshacerse de sus discos de siempre puedan acercarse para que les hagan una valoración. En este punto, Manuel Otero destaca que «as primeiras edicións son as que valen un pouco máis», por lo que suelen traerse a la feria previo acuerdo con la persona interesada. En la feria pueden encontrarse vinilos desde 1 euro.