Los ourensanos solidarios

?uando todavía estamos acostumbrándonos al otoño después del verano vacacional, es momento de hacer planes para ocupar el tiempo libre con actividades de lo más diverso, desde iniciar una colección hasta ir al gimnasio. Es por tanto la época ideal para que colectivos que funcionan precisamente gracias al tiempo libre de los ciudadanos renueven y amplíen su lista de colaboradores. En la provincia tanto Cruz Roja como Manos Unidas, tienen en marcha iniciativas específicas de captación, pero también el resto de colectivos aprovechan para recordar que todas la ayuda es bien recibida para poder continuar con sus actividades. La oferta de estas oenegés y entidades es diversa y se adapta a cualquier tipo de disponibilidad, desde la colaboración esporádica a la diaria. Según sus registros, entre todos controlan a un pequeño ejército de cinco mil personas, de las que más de tres mil se implican cotidianamente. El perfil La de mayor volumen es Cruz Roja, con un censo de tres mil voluntarios, de los que 1.080 están considerados como activos -724 en la capital y el resto repartido en las siete asambleas comarcales- y son quienes hacen funcionar los distintos servicios. Es también la que oferta un abanico más amplio de posibilidades. Desde atención y cuidado de personas mayores, hasta trabajos y servicios con presos, ex drogadictos, inmigrantes, mujeres, personas sin techo, o en la unidad de socorro y emergencias, entre otras. Su perfil también es el más variado. Hay personas jubiladas, muchos otros están entre los 40 y 55 años y también jóvenes. Precisamente en ellos está centrada la campaña de este año, ya que también son los que tienen una permanencia más corta debido a traslados por estudios o para incorporarse al mercado laboral en otras ciudades. Curiosamente la segunda entidad que en estos momentos está volcada en la captación, Manos Unidas, tiene también su mirada puesta en la juventud, aunque en este caso, y según ha explicado su presidenta, se trata de dar a conocer su labor a este colectivo, además de sumar efectivos. En la actualidad poseen un grupo permanente de trece personas. Para los ourensanos que quieran colaborar dedicando su tiempo a cuidar de la infancia hay cuatro colectivos con programas en la provincia. La Cruz Roja oferta las Familias Acogedoras para hacerse cargo -por un período variable de tiempo-, de los pequeños que han sido separados de su familia por decisión judicial y están bajo tutela de la Xunta, pero para los que es aconsejable vivir dentro de un entorno familiar. Atención a la infancia También por tiempo limitado, en concreto durante las vacaciones, pueden colaborar con Solidaridade Galega co Pobo Saharaui o con Ledicia Cativa. Ambos colectivos traen cada verano desde los campos de refugiados saharauis y desde los orfanatos del área afectada por Chernóbil a niños para aliviar sus condiciones de vida. Unicef cuenta con comité propio en la provincia ourensana desde hace un cuarto de siglo. La veintena de voluntarios que habitualmente trabaja en la delegación se ocupa de planificar campañas, organizar actividades de concienciación para adultos y escolares, charlas o talleres.