Un libro que se escucha
Opinión
09 May 2015. Actualizado a las 05:00 h.
S ale un libro sobre los Eskizos, ese grupo que sacudió la escena roquera gallega en los últimos ochenta y primeros noventa, un texto que tiene la misma electricidad de la que hermoseaba la banda. El milagro, potente en frases con vatios, lo ha hecho sobre todo Javier Becerra, compañero en La Voz y uno de esos seres que gozan de una capacidad mágica para interpretar la música. Pero no se pierdan en este trabajo el prólogo de Fernando Molezún y el epílogo de Pedro Granell, sí, Pedro Granell, el de los Eskizos. Empecemos por el principio. El prólogo es un aperitivo exquisito que nos sirve Fernando Molezún, compañero también en La Voz y en Radio Voz. Un ejercicio de nostalgia y sinceridad. No tiene nada que ver con el resto de prólogos del mundo, que normalmente no sirven para nada. Aquí se empieza con un inteligente lingotazo de pasado. Luego viene la catedral. La construcción de Javier Becerra, una tesis de periodismo. Oficio y profesión de la mano. Está el chiquillo que presenció aquel concierto de los Eskizos y está el profesional que deja que hablen los protagonistas, los que rodearon a los protagonistas y los expertos. Por estar están hasta el hermano tan importante de Pedro Granell, Nacho, y otro hermano, tan importante como el de Pedro, el mío, Alberto Casal (autor del primer libro sobre rock en Galicia). Javier Becerra nos regala unas páginas efervescentes. Nos recuerda que lo pequeño es hermoso. Y que, en cualquier rincón del mundo, es posible todo. Y cierra Pedro Granell, con unos folios que destilan la misma pegada que la música que hacía con sus compañeros en los Eskizos: arte, pasión, emoción. Escuchen este libro. Suena, y sueña.