¿TOTAL DESINTERÉS?
Opinión
SOFÍA VÁZQUEZ
31 Oct 2001. Actualizado a las 06:00 h.
Inditex, que sabe bien lo que es la globalización, acaba de firmar un pacto de respeto con los derechos humanos y el medio ambiente. El compromiso adquirido cobra mayor valor porque parte de una crítica airada hacia la explotación infantil, hacia el trabajo de esclavos (hombres y mujeres) y hacia el delito ecológico. Son derechos y deberes elementales que no se cumplen, que incluso se violan. Se pueden hacer críticas a la compañía, pero no restarle valor a su nuevo compromiso, que también le dará de ganar. Ya sabe usted que la solidaridad cotiza en Bolsa.