Fran Vázquez no se atreve a cuantificar la permanencia

Fran Vázquez abandonó el Multiusos de Sar entre contrastes, apoyado en unas muletas por la lesión que sufrió hacia el final del tercer cuarto pero con una sonrisa por la victoria y por el apoyo de su gente. «De Chantada había un mínimo de doce aquí», comentó. Y se sacó también el mal sabor de boca de no haber podido jugar en la primera vuelta en Lugo, por unos pequeños problemas físicos.

El Zaragoza está ya a salvo de todo peligro y no solo eso, sino que se ha metido de lleno en la lucha por los play off por méritos propios. Encaró la temporada con el objetivo de conseguir cuanto antes doce victorias, entendiendo que ahí estaría el umbral de la permanencia. Y una vez sobrepasado con creces ese primer desafío, vuela.

El pívot, sin embargo, no se atreve a cuantificar el número de triunfos que asegurarán la continuidad en la Liga Endesa: «No lo sé. Es de las temporadas más igualadas que recuerdo. Con dos victorias vas hacia arriba, con dos derrotas te descuelgas. Está muy complicado todo. Ojalá los dos equipos gallegos sigan en la ACB».

Un equipo lanzado

De ser así, volvería a visitar Sar y O Pazo con el Zaragoza, porque le queda un año de contrato a orillas del Ebro y no se plantea a media plazo acercarse a casa. Entre tanto, disfruta de una campaña dulce: «Estamos en un buen momento, metiendo mucho, también contra equipos de Euroliga y que están más arriba. La del Obra es una pista muy difícil. Ganamos y nos vamos muy contentos». Tiene claro cual fue la clave para ese resultado: «Los paramos bien de fuera, que es su arma principal. Ahí sacamos bastante ventaja». Pese a todo, el Obra anotó diez triples en la primera parte, y añadió cinco tras el intermedio, dos de ellos en el último minuto. El pívot de Chantada subrayó que, incluso así, «les costó encontrar los tiros». Y la diferencia entre un período y otro estuvo en un detalle: «Tratar de anticiparnos o poquito más, un segundo antes, e intentar que no cogiesen una racha, porque es un equipo que vive mucho del triple». Además, se sumó el acierto de Nacho Martín, una pesadilla desde la larga distancia: «Jugó a un nivel increíble».

El único punto negativo de la jornada fue la lesión y, por las sensaciones, no se atrevía a hacer un pronóstico: «Es algo muscular, pero hasta que haga las pruebas el lunes no sabremos el alcance, si es algo de pocos días o si va para más tiempo».