Un gallego en la cima de Italia

El fútbol sala gallego traspasa fronteras. Y no solo eso. También las conquista. Con su sapiencia, su saber estar, sus conocimientos, su preparación... Y si no que se lo pregunten a Julio Fernández Correa (San Ciprián, 1961), que acaba de ganar la Liga italiana de fútbol sala dirigiendo al Luparense.

«Ha sido una experiencia muy bonita, preciosa, inolvidable... Llegar al quinto partido de una final por el título, con el pabellón lleno, retransmitido para todo el país por la RAI y ganar el partido decisivo de goleada. ¿Qué más se puede pedir?», resume entusiasmado este técnico gallego que acaba de alcanzar la gloria en Italia.

Pero Julio Fernández no se ha conformado simplemente con la victoria. Ha completado con su equipo una temporada que pasará a la historia del club. Ha batido el récord de puntos, el de goles y ha enamorado con su fútbol sala ofensivo, del que ya había dejado buena constancia en España.

«Quedamos primeros de la Liga regular con ocho puntos de ventaja sobre el segundo y aún así la gente decía que no éramos equipo para ganar un play off, que teníamos ese defecto», recuerda. «Pero hemos demostrado una gran fortaleza moral. Ganamos todas las eliminatorias en el último partido e incluso tuvimos que remontar un 1-2 en la serie de la final», añade.

Un éxito que ha conseguido liderar desde la humildad. «Hace cuatro años, cuando me vine a Italia, comencé desde la categoría más modesta. Ganar ahora el Scudetto es algo espectacular». Por eso ahora quiere disfrutar de las vacaciones y pensarse muy bien el paso siguiente de su carrera como entrenador. «Acabé contrato y ahora quiero meditar hacia dónde encaminar mi carrera. En Italia tengo un gran cartel, pero no descarto nada», comenta.

Parece poco probable que Julio Fernández siga en la Luparense. El técnico gallego podría buscar nuevos retos profesionales. Lo suyo es construir proyectos ganadores. No le gusta acomodarse en la autocomplacencia. Por eso tampoco descarta la posibilidad de irse a una selección. «Para eso habría que esperar a después del Mundial. Pero si aparece alguien que quiera contratar un técnico español y se dan las cosas bien, ¿por qué no?», reconoce.

Julio Fernández se ha centrado en estos cuatro últimos años en escalar a la cima del fútbol sala italiano. Una distancia que le permite reflexionar sobre el fútbol sala español, y gallego. «Se ve que la crisis ha pegado muy fuerte. Los clubes están sabiendo mantenerse en pie gracias al gran trabajo con la cantera realizado con anterioridad. Lo del Azkar ha sido un milagro y lo del Lobelle lo mismo, ojalá que puedan seguir adelante», destaca.

Eso sí, el técnico gallego apunta una posible solución para la Liga Nacional de Fútbol Sala. «Creo que sería una buena solución que los clubes de fútbol realizasen secciones de fútbol sala. Igual que muchos países se fijan en nosotros, sobre todo en cuestiones tácticas, nosotros deberíamos mirar hacia Brasil y ver que allí es así. Clubes de fútbol con secciones de sala», comenta.

¿Cuánto le valdría al Celta o al Dépor meterse en el fútbol sala profesional? «Que piensen que esto, más o menos, solo les costaría lo que una ficha de un jugador del primer equipo. Son cantidades que no son demasiado importantes para ellos, y que sin embargo podrían depararles muchísimas alegrías», argumenta.

Es la palabra de un técnico que como jugador lo ganó todo. El primer capitán que ha tenido la selección española. El mismo Julio Fernández.