La Voz de Galicia

El Rexenera Fest de Carballo toma más ritmo

Carballo municipio

CARBALLO / LA VOZ
Mural de Lula Goce en la calle Iglesia

Los alumnos del obradoiro de Spok intervinieron en los depósitos. Ya están en la localidad, por otra parte, todos los artistas invitados

30 May 2018. Actualizado a las 05:00 h.

Hasta el 3 de junio • Embellecer algo los enormes depósitos de agua de Carballo, visibles desde muchos puntos del casco urbano, era un ruxe ruxe que siempre estuvo ahí cuando llegaba el Rexenera Fest o cuando se anunciaban nuevas intervenciones del proyecto «Derrubando muros con pintura». Los alumnos del obradoiro de aerosol impartido por Spok iniciado ayer serán los encargados de tal tarea.

Ana Garcia

De hecho, intervinieron ayer en la base y hoy darán por concluidas sus prácticas. Con esta actividad paralela, una de las muchas programadas en esta nueva edición del encuentro (mesas, conciertos...), va tomando aún más ritmo el festival de arte público carballés, que ya suma obras acabadas y tres nuevos murales en marcha, con los artistas Doa Oa (calle Río), Daniel Muñoz, SAN (rúa Alfredo Brañas), y Bosoletti, en la Cristina. Mientras, no cesan las valoraciones -sobre todo en las redes- de las creaciones de Milu Correch o Lula Goce, primeras en iniciar sus trabajos. De Milu -que terminó su obra- hasta habló ayer en el Cita co Concello el alcalde, Evencio Ferrero, quien recordó que, tal y como se dijo, Milu volverá a la localidad para pintar la obra inicial que traía en mente y que tuvo que cambiar. Finalmente, dio vida a dos meigas conjurando a través de sus brazos.

ANA GARCIA

También, al ser preguntado sobre ello, tuvo palabras para el asunto Yoseba MP, que concluyó su obra en O Couto. Celebra que ahora Carballo vaya a disfrutar del arte de Milu dos veces y se muestra optimista: «Qué sería del arte sin detractores... No puede y no debe gustar a todos, si no, ¡qué aburrimiento! El público se educa si no se borran las cosas que no encajan, y si no se educa, se acostumbra... pero igual fue más práctico cambiarlo y evitar que los dueños del edificio acabaran por borrarlo».


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