Caretas, ambulancias de cartón y las preguntas que desde Catoira quieren hacerle a la Xunta

En Catoira han convertido los miércoles en día de reivindicación. Vecinos y vecinas de la localidad han vuelto a darse cita a las puertas del centro de salud de Campo Subido para reclamar que se doten a estas instalaciones con un médico y un pediatra. La movilización hizo gala, como ya viene siendo habitual, de una buena dosis de humor: una ambulancia de cartón circuló entre las personas concentradas que reclamaban, entre otras cuestiones, que la medicalizada que habitualmente tiene su base en O Salnés vuelva a este puesto, tras haber sido trasladada a Sanxenxo con la llegada del verano. Ese traslado de la ambulancia también ha provocado que el BNG de la comarca haya procedido a realizar una recogida de firmas con las que exige que no se retire el vehículo de O Salnés. Las firmas serán entregadas hoy mismo, a las 11.30 horas, en el Parlamento de Galicia, donde se debatirá además este tema en la Comisión de Sanidade, de nuevo por iniciativa de la formación nacionalista.

Pero volvamos a Catoira, donde la población, además de dotarse de una ambulancia de cartón para la protesta, también convocó al responsable del área sanitaria, al conselleiro de Sanidade y al presidente de la Xunta, personas a las que consideran responsables de los recortes que ha sufrido el servicio en esta localidad arousana. Como quiera que ninguno de ellos iba a acudir a la cita, tres personas se cubrieron el rostro con caretas que los representan y se presentaron ante el resto de la gente que allí se había dado cita, que los interpelaba a voz de grito pidiendo un servicio de pediatría que funcione todos los días, un médico más y, en resumen, más medios para la sanidad pública..