La Voz de Galicia

El picudo vence a las palmeras de A Illa

Cambados

bea costa A Illa / la voz

El Concello inicia hoy la tala de una docena de ejemplares en varias calles

12 Sep 2019. Actualizado a las 05:00 h.

El Concello de A Illa da por perdida la batalla contra el picudo rojo, el escarabajo que se instala en las copas de las palmeras, hasta secarlas. Después de varios meses de tratamientos para intentar salvar a los árboles, sin resultados óptimos, ha decidido cortar por lo sano y hoy iniciará la tala de una docena de ejemplares. Empezará por los que hay en la avenida de A Ponte y a estos seguirán dos en O Regueiro, cuatro en Marqués de Bradomín -al lado de las casas modernistas- y otro en O Naval. El Concello ha contratado a una empresa para realizar esta tarea, que se prevé emplee un par de días en completar la tala y tiene un coste para las arcas locales de 2.663 euros, menos del dinero que se lleva gastado en tratamientos.

El pasado invierno ya cayó ante la motosierra otra palmera en O Cabodeiro y no se descarta que haya que tomar esta drástica medida en el futuro con otros árboles, pero, de momento, se seguirá tratando la palmera de los jardines de Goday que, aunque enferma, el Ayuntamiento quiere conservar dada su antigüedad y ubicación. Por ahora también se mantendrán en pie las palmeras de O Regueiro que todavía no han sido infectadas por el picudo, aunque los planes urbanísticos para esta zona las acabarán condenando a convertirse en leña.

El gobierno local aún no ha tomado una decisión respecto a si va a sustituir las malogradas palmeras con otras especies arbóreas aunque, en el caso de la avenida da Ponte, no parece probable toda vez que años atrás ya se cortaron los magnolios que flanqueaban la carretera porque restaban visibilidad para la conducción.

La tala que empieza hoy obligará a restringir el estacionamiento en la avenida de A Ponte, si bien no se prevén cortes de tráfico.

El picudo rojo se ha cobrado ya numerosas víctimas en los jardines y parques de la comarca. En Vilagarcía, por ejemplo, tuvieron que cortar varios ejemplares en el parque de O Centenario y en Ravella y en Vilanova y en Cambados también se vieron abocados a recurrir a esta vía.

En A Illa pensaban que podrían sortear esta plaga sin tener que cercenar los árboles, pero, finalmente, no hubo otra opción, según informa el concejal de Servizos, Luis Arosa.


Comentar