El Obradoiro busca el botón de reinicio

De maravillar en las primeras nueve jornadas, con un balance de siete triunfos y solo dos derrotas, a entrar en barrena en las seis siguientes, en las que no conoce la victoria. La pregunta está sobre la mesa: ¿Qué le pasa al Monbus Obradoiro? Y todas las respuestas apuntan en una dirección, en la del bajón defensivo. Pasó de ser el equipo que menos puntos encajaba a recibir más de ochenta en varios partidos. Y en ataque, sobre todo en las tres últimas citas, el colectivo tampoco ha estado fino.

Cada batalla es una historia. Y de estas seis últimas derrotas, cada una tiene la suya. Tres han sido contra rivales de Euroliga: Baskonia, Real Madrid y Unicaja de Málaga. En las dos primeras citas, el Obra llegó al tramo final con opciones.

En Sevilla, cuatro minutos nefastos le costaron el partido. El conjunto andaluz, que andaba bajo de confianza en aquel momento, subió la autoestima y enlazó cuatro triunfos seguidos. En Madrid, ante el Estudiantes, la historia fue la de casi siempre en esas visitas: mal día y mal resultado. Y frente al Andorra, la floja defensa en la primera parte devino determinante.

El colectivo de Moncho Fernández se enfrenta a una situación similar a la que acaba de superar el Zaragoza, que ganó al Estudiantes el domingo después de dos prórrogas y tras seis jornadas sin conocer la victoria. El Betis estuvo diez sin ganar. El Burgos, siete. Y el Bilbao cinco.

El Obradoiro ya ha dicho adiós a la Copa. Lo que se plantea es resetear para tratar de reencontrar el camino que le sirvió para soñar con una clasificación que hubiese sido histórica y que le vale para seguir en la zona media de la clasificación.

El equipo reanudó los entrenamientos pendiente de Albert Sabat, que todavía nota bastante dolor en la zona costal en la que se llevó un gran golpe en el partido ante el Andorra. Nemanja Radovic se mantiene fuera de grupo. Está previsto que hacia mitad de semana se vaya sumando al trabajo colectivo paulatinamente.