Un banco de créditos rápidos admite usura y devuelve mil euros a una clienta viguesa

e. v. pita VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

XOAN CARLOS GIL

Wizink se allanó en un pleito en Vigo y reconoció las pretensiones de la demandante pero ahora la consumidora le reclama también el pago de las costas procesales

09 oct 2017 . Actualizado a las 13:11 h.

El banco Wizink, especializado en emitir tarjetas de crédito rápido, se ha allanado en una demanda en Vigo que presentó una clienta contra la entidad por usura y le ha devuelto mil euros que le cobró de más por los elevados intereses que le impuso. La empresa financiera obtuvo como frutos del capital casi la misma cuantía que la suma que prestó.

La demandante dispuso con su tarjeta de 1.267 euros y acabó pagando 2.282, razón por la que el banco ha decidido devolverle 1.015 euros. La entidad le ingresó el dinero en la cuenta de consignaciones y depósitos del juzgado.

Este negocio financiero se ha allanado porque quiere evitar que el juez le imponga el pago de las costas del proceso, lo que la ley le permite si reconoce de buena fe su error y paga antes de que termine el plazo para contestar la demanda. La ley favorece al litigante vencido cuando su actitud evita un pleito largo y costoso. Solo tendría que pagar costas si la cliente hubiese requerido fehacientemente y justificado el pago o se hubiese iniciado un procedimiento de mediación o una solicitud de conciliación.

El debate ahora ya no es si hubo usura o no, sino si el banco puede librarse de pagar las costas de la defensa de la clienta. En eso trabaja ya el despacho de David Alfaya, que sigue adelante con la demanda contra Wizink, al que uno de los clientes en Vigo le reclama diversas cantidades por intereses abusivos y usurarios. En uno de los procedimientos ordinarios que se celebra en el juzgado de primera instancia número 7 de Vigo, el banco se allanó y reconoció todas las pretensiones de la demandante, por lo que aceptó devolver todos los intereses cobrados de más al cliente. El bufete de Alfaya está pendiente de conocer la sentencia y comprobar si el juez condena a la entidad a pagar las costas.

La demandante solicitó en su día la declaración de nulidad con base al supuesto carácter usurario del tipo de interés remuneratorio aplicado a la tarjeta de crédito que contrató. El prestamista admite que, en caso de perder el pleito, tendría que devolver todo lo que exceda del capital prestado.

La mujer alegó que el banco había actuado de mala fe cuando ella tenía que pagar las cuotas del préstamo al quedarse sin saldo suficiente para atenderlo debido a sus dificultades económicas y a que tenía los recibos domiciliados. Wizink sostiene que siempre tuvo voluntad de cumplir.