Al no poder volar a Finlandia, al final viajaron en su coche hasta Helsinki y luego llegaron «a dedo» al cabo noruego, desde donde emprendieron su marcha hacia el sur.
Ryanair se vio obligada a cancelar casi 10.000 vuelos en los 18 días posteriores a la erupción del volcán islandés Eyjafjalla, que generó una nube de ceniza que causó el cierre del espacio aéreo de media Europa.
Juan Rivas y Andrés Fraga recorrerán hasta noviembre 6.000 kilómetros entre el cabo Norte, en Noruega, y Santiago; la aventura la van contando en Internet
Acusan al ministerio de Transportes del Reino Unido de haberse excedido en su reacción a la llegada de las cenizas volcánicas al prohibir, sin más, los vuelos.
Reconoció que cuando se produjeron las erupciones estaba lejos de la fuente de emisión y señaló que si bien había peligro a una distancia de hasta 200 kilómetros cree que lo era tanto a 2.000 kilómetros.