Manitas de cordero al curry
Decidimos alejar las manitas de su elaboración más conservadora para juntarla con una especia que marida perfectamente con este tipo de carne. ¿El toque maestro? Rematar el plato con un huevo frito
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Las manitas de cordero lechal, como plato de la casquería popular, se suelen preparar con salsas tradicionales que incluyen tomate, vino blanco, pimentón… En fin, de manera similar a otras piezas de este estilo. No obstante, es habitual encontrar infinidad de platos que mezclan carne de cordero con el curry. Así que decidimos alejar las manitas de su elaboración más conservadora para juntarla, precisamente, con esta especia. Además, con un huevo frito le damos un toque aún más personal y castizo que nos encantó. En La Cocina es Vida encontrarás más combinaciones difíciles pero, siempre, acertadas.
- 8 manitas de cordero lechal
- 1 cebolla roja
- 1 diente de ajo
- 50 gr de jengibre
- 100 gr de concentrado de tomate
- 200 ml de leche de coco
- 1 cucharada de curry
- 2 huevos de corral
- Limón
- Sal
- Aceite de oliva virgen extra
Comenzamos, como con casi todas las elaboraciones con manitas de cordero, cociéndolas y deshuesándolas. Para ello, las lavamos muy bien, quitándoles los restos de pelillos que pudieran tener, y las cocemos junto con medio limón en agua salada en la olla exprés durante unos 45 minutos.
Pasado este tiempo, las dejamos enfriar y las deshuesamos cuidadosamente para que no quede ningún trocito.
Continuamos poniendo en una cazuela un poco de aceite de oliva y echamos la cebolleta muy picada, el ajo y el jengibre rallado. Rehogamos a fuego lento durante unos 10 minutos y añadimos el concentrado de tomate.
Mezclamos todo muy bien y, a continuación, echamos la leche de coco junto con la cucharada de curry y las hojas. Añadimos las manitas de cordero, rectificamos de sal y las dejamos cocer a fuego suave hasta que la salsa comience a adquirir cierta consistencia.
Ya solo nos queda freír los huevos en abundante aceite.
Servimos de manera individual en cada plato y terminamos poniéndole encima el huevo recién frito.
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