3, 2, 1... Sin pedales. ¿Pero cómo conseguimos el equilibrio? Aunque existen diferentes métodos, este truco casero se ha vuelto viral en redes. Preguntamos a los expertos
19 sep 2024 . Actualizado a las 09:24 h.Estos días se está colando un vídeo en redes que promete ser un truco para aprender a andar en bici en cuestión de 15 minutos. Como quien más y quien menos ha pasado por ese trance, bien sentado en el sillín o sujetándolo, solo por el tiempo ya parece muy atractivo. A priori, promete. Para los que no lo hayan visto todavía, el truco en cuestión consiste en sujetar al niño con una toalla o sábana por la cintura. Es decir, el niño está sentado en una bici sin ruedines, y a su lado, un adulto agarra los extremos de la toalla (en la mayoría de las versiones que se han colado por Instagram o TikTok) para que mantenga la posición. En los subtítulos se recomienda correr al lado del menor dándole seguridad, sobre todo, al principio, mientras se va soltando poco a poco la toalla. Supuestamente tras un par de vueltas, el pequeño consigue hacerlo solo sin la ayuda de nadie. Aseguran que es una forma rápida y segura de conseguir el equilibrio encima de las dos ruedas, pero ¿es realmente así? ¿Es recomendable usar esta técnica con los pequeños que se están iniciando en el mundo de las bicis?
Para la entrenadora personal Amelia Roca el vídeo puede tener sus ventajas. «En principio, parece cómodo para la persona que enseña, porque no se rompe la espalda agarrando el sillín de la bicicleta, pero correr al lado de la bici me parece un poco complicado sin tropezar en los pedales, aunque si eres lo suficientemente alto para agarrar y separarte, perfecto», indica Amelia que, para aplicar con niños hasta una determinada edad sin que sean corpulentos, le parece una buena idea. Incluso considera positivo lo de ir retirando poquito a poco la toalla para progresar. Eso sí, respecto al tiempo estimado ya tiene más dudas. «Lo de que aprenden en 15 minutos ya te digo que no. Será algo más rápido que el método tradicional, pero no es mágico. El equilibrio no se consigue en 15 minutos», matiza.
UN FALSO EQUILIBRIO
En A Escola da Bici, en A Coruña, no lo ven tan claro. «Evidentemente, no lo hemos testado en A Escola da Bici, pero nuestra experiencia lo que nos dice es que no es lo ideal. Nosotros utilizamos el método bikeability, que consiste en una serie de pasos con los que tantos los niños como los adultos van ganando el equilibrio dinámico para posteriormente pedalear, y evita cualquier agarre al alumno», explica Álex Voces, uno de los monitores de la escuela. La principal razón, esgrime Álex, de evitar el agarre adonde sea (a la persona, al sillín o incluso la parrilla trasera, si la bicicleta tiene portabultos) es que genera una situación de confort «irreal» para la persona que está aprendiendo. «Realmente, no está ganando el equilibrio dinámico, sino que está siendo nuestra acción, mediante fuerza, la que está haciendo que la bicicleta se mantenga en equilibrio, sería un equilibrio falso», explica.
«Es preferible usar una toalla a una barra, aunque nosotros seguimos recomendando el método de la rampa, para hacer la transición, pero como alternativa secundaria está bien, porque el de usar una cuesta no funciona siempre», señala Julen Izaguirre, de Kalapie, una asociación de ciclistas urbanos que fomenta el uso de la bici en la ciudad. Los cursos que ofertan en el País Vasco para aprender a moverse encima de las dos ruedas tienen como base cuatro ejercicios, en los que tanto el adulto como el niño que quiere aprender van trabajando el equilibrio progresivamente, primero andando con una bici con los pedales plegados, luego cogiendo más impulso hasta que consiga cierta soltura para practicar en una zona con cierto desnivel. «Sin embargo, no me parece mal usar la toalla, siempre y cuando se haga a una velocidad calmada, si se va rápido, sí lo veo peligroso», apunta.