Rutina, paciencia y determinación es lo que recomienda el especialista durante el confinamiento. Si los críos sufren ansiedad, lo primero es escucharlos
04 abr 2020 . Actualizado a las 09:42 h.Díaz del Valle asegura que es importantísimo que los niños estén conectados con otros amigos durante este período, así como explicarles en momentos de bajón que esta situación es la misma para todos, el modo que tenemos de ayudar.
-¿Qué deberían hacer los niños en este confinamiento para tener una buena salud mental?
-Deberían seguir unas actividades por la mañana, otras por la tarde, atender a sus tareas escolares. Que el fin de semana sea distinto: que aprovechen para leer y es importante que mantengan el contacto con los amigos por redes sociales.
-Si un niño se pone a llorar porque está angustiado, ¿qué hay que hacer? ¿Cambiamos de tema? ¿Lo distraemos? ¿Cómo lo ayudamos?
-No, lo primero es escucharlo. Y luego explicarle que esto es algo temporal de lo que se va a salir. Que lo estamos haciendo todos y que lo que le pasa a él también lo están haciendo multitud de niños y de mayores para solucionarlo: escuchar y mantener rutinas. Mucha conversación en familia, aunque también hay muchos profesionales que ahora mismo están trabajando y no pueden.
-Si está agobiado, podríamos decirle que salga un minuto, que nos acompañe a bajar la basura, ¿por ejemplo?
-No, al ser una situación tan corta, no va a servir. Además, es necesario que sepa que el aislamiento hay que respetarlo, que no hay excusas para salir a la calle: sí hay que abrir las ventanas, tomar un poquito el sol, asomarse un poco. Estimularlo con el tema de los aplausos, la música que se pone en los balcones. Todo eso le va a venir bien, porque va a ver que lo que le sucede le pasa a muchos otros niños.
-¿Es importante implicarlos en las tareas domésticas?
-Es fundamental. Esto les va a ayudar a sentirse más partícipes en lo que está pasando y, como no suelen hacerlo, les va a entretener.
-Si convivimos con alguien que sufre crisis de ansiedad, ¿qué debemos hacer?
-Lo que hemos pedido ya es que las personas que sufren esquizofrenia, autismo, problemas de ansiedad graves o claustrofobia, se les permita salir un ratito. Es solo bajar y caminar unos metros para ayudar en esa crisis que es difícil de controlar. Pero es difícil, en esta situación estamos aprendiendo todos al mismo tiempo. Paciencia y determinación, no hay otra.
-¿Habrá consecuencias psicológicas de este confinamiento?
-He estado leyendo algún artículo sobre el confinamiento en China y no ha habido problemas psicológicos y han estado más tiempo que nosotros. No ha habido nada grave, salvo personas con alguna patología previa: de tipo psiquiátrico o psicológico. Yo creo que si lo hacemos bien, no tiene por qué haber ningún problema.
-Los niños también están viendo a sus padres en una situación extrema. ¿Hay algún inconveniente en que los vean llorar o rabiosos?
-Eso no tiene ningún problema siempre que se lo expliquemos, pero hay que darles el mensaje positivo de que esto va a pasar y que todos tenemos que ser responsables. Que debemos seguir las indicaciones que nos dan, que todos tenemos momentos de bajón, pero que de esto vamos a salir.
-Los niños pueden manifestar también esa rabia gritando, con alteraciones o pesadillas.
-Sí, estas conductas disruptivas son más habituales en los más pequeños, es normal que se enfaden, que tiren cosas al suelo, por eso es tan importante establecer las rutinas. Y es importante también conectarlos con los amigos, que los vean, que hablen con ellos por el móvil, por videollamada, que no se sientan aislados de su círculo.