Es una de las primeras causas de muerte accidental, pero resulta tan frecuente como evitable. El médico Leandro García nos da las claves para actuar. La primera y más importante, no ponerse nervioso
27 jul 2019 . Actualizado a las 17:37 h.«-¿Por qué hay tantas muertes por atragantamiento?
-Son un problema importante. Primero, por su elevada frecuencia. Si excluimos las causas de muertes naturales por enfermedad y nos quedamos con las accidentales es una de las principales, posiblemente la tercera. Pero son evitables con una adecuada educación, sin objetos que puedan meterse en la boca, y sabiendo que hay alimentos que los facilitan.
-¿Cuáles son esos alimentos?
-En el caso de los niños, caramelos, chucherías, frutos secos, uvas, aceitunas, palomitas de maíz... En personas mayores con problemas de masticación y deglución, las carnes, si las cortamos en trozos grandes o no se mastican bien, sobre todo en usuarios de dentaduras postizas.
-¿Cómo actuamos?
-Afortunadamente tenemos un servicio de Urgencias extrahospitalario fantástico a través del 061 que ofrece dos ventajas. La primera, que vamos a tener al otro lado a un experto. Y la segunda, que puede desplazar los medios necesarios. Pero no debemos esperar a que lleguen los sanitarios, sino emprender las medidas iniciales con la ayuda del servicio telefónico.
-¿Qué es lo más importante?
-Lo fundamental es mantener la calma y ser capaz de transmitirla, siendo conscientes de que puede ser un atragantamiento que obstruya completamente la vía aérea, pero la mayoría de las veces es parcial y el paciente va a estar incómodo, pero va a ser capaz de seguir respirando y de toser. Y lo primero que hay que enseñarle a la gente es que si el paciente puede toser, no tenemos a nuestro alcance ningún mecanismo ni actuación más efectiva que la tos para desobstruir la vía aérea.
-¿Y si la vía está obstruida del todo?
-Si el paciente no está consciente, no respira, por lo que se va a producir una parada cardíaca. Ahí lo prioritario es emprender medidas de reanimación. Y si está consciente pero no es capaz de toser ni de respirar, las maniobras pueden ayudarle. Aquí hay dos medidas, los golpes en la espalda y las compresiones abdominales, lo que llamamos la maniobra de Heimlich.
-¿Son buenos los golpes en la espalda?
-Si el paciente tose hay que dejarle toser y no golpearle, porque puedes hacer que el cuerpo se desplace en vez de hacia fuera hacia dentro, y que lo que era una obstrucción parcial se convierta en una completa. Si no puede toser, sí que se pueden contemplar, pero iniciando las medidas con la maniobra de Heimlich y solo en el caso de que esta no sea efectiva después de cuatro o cinco intentos. Los golpes deben darse reclinando un poco al paciente hacia delante.
-¿Cuáles son las pautas a seguir?
-Hay situaciones de mayor predisposición. Los niños, los ancianos, la ingesta de alcohol en las comidas y en el aperitivo, una costumbre muy nuestra, puede favorecer los atragantamientos. A partir de ahí, cortar bien la carne, masticar y pensar que la costumbre de hablar y comer a la vez es muy social, pero muy poco sana.